La controvertida mudanza del Príncipe Harry y Meghan Markle a Frogmore Cottage, Windsor, levantó una gran polémica no solo por los gastos que pudiera ocasionar, sino por lo que podía leerse entre líneas: presuntos problemas entre los Duques de Cambridge y los Duques de Sussex.
Nada más lejos de la realidad, y si todavía alguien tenía dudas, Dickie Arbiter, antiguo jefe de prensa de la Casa Real Británica ha concedido una entrevista a US Weekly en la que niega que entre los dos hermanos y las dos cuñadas pueda existir algún tipo de mal rollo.
Aunque su intención era buena, la explicación no lo es, ya que puede ofender a las clases medias y bajas, que son mayoría. Arbiter explica que la razón de su traslado es que el apartamento que ocupan en Kensington Palace no es muy grande y necesitan más espacio: "Ahora su casa se compone de dos dormitorios, un salón y un comedor. No tienen ni jardín. Y así no hay manera de formar una familia".
El antiguo jefe de prensa olvida que la mayor parte de la gente ha logrado formar familias en espacios más pequeños y menos lujosos que el apartamento del que disponen los Duques de Sussex. Asimismo, los jardines de Kensington Palace tienen un área privada que pueden utilizar, al igual que lo hacen los Duques de Cambridge.
Oficinas separadas
Otra cosa es que el Príncipe Harry y Meghan Markle quieran más espacio, y afortunadamente para ellos, pueden acceder a él y residir en un entorno más natural, amplio y tranquilo en el que estén más a gusto.
Además, con la separación de las oficinas de los hermanos Mountbatten-Windsor se busca dar un perfil de hombre de Estado al Príncipe Guillermo, mientras el Duque de Susssex puede centrarse más en las causas en las que se ha volcado en solitario, y en las que ahora trabaja con Meghan Markle. Dickie Arbiter defiende la separación de oficinas también como una buena decisión, y esta vez sin ofender a nadie.