Galería: La Familia Real Sueca en imágenes
La Familia Real Suecia tiene una cita anual con los Premios Nobel cada 10 de diciembre. Después de que el Nobel de la Paz se entregue en Oslo en presencia de la Familia Real Noruega, la acción se traslada a Estocolmo, donde las restantes categorías son entregadas por el Rey Carlos XVI Gustavo de Suecia con todos los honores.
La gala de 2019 era muy especial por la vuelta de la Princesa Magdalena. Desde su marcha al extranjero su presencia nunca está asegurada, por lo que provocó una gran alegría saber que iba a cruzar el Atlántico para estar presente junto al resto de la Familia Real en ejercicio.
La Duquesa de Hälsingland y Gästrikland consiguió brillar gracias a su vestido fucsia de Ángel Sánchez con escote palabra de honor. Sin embargo, lo más llamativo fue la elección de sus joyas. La benjamina del Rey abrió el joyero real para lucir la espectacular tiara Kokoshnik de aguamarinas, pieza que perteneció a su abuela paterna, la Princesa Sibila, y que Magdalena de Suecia había llevado antes para una foto oficial.
No menos elegante estaba Sofia Hellqvist. La más sencilla de las royals suecas se enfundó un vestido azul turquesa firmada por Emelie Janrell. Adornó su cabeza con la tiara que le regalaron los Reyes con motivo de su boda y que suele transformar según la ocasión. Sin duda, fue un gran acierto.
El desacierto de Victoria de Suecia
El desastre llegó de la mano de la Princesa Victoria, que patinó con un extraño vestido de Selam Frssahaye que rompe con las buenas elecciones que suele realizar para los Nobel. Sí acertó con la tiara, la Fringe, una de las que luce con más orgullo. Si la Heredera falló, todo han sido alabanzas para la Reina Silvia, que estaba espectacular con un diseño de Elie Saab y con una perfecta elección de joyas en la que destacó la tiara de las Nueve Puntas.