El Duque de Södermanland se mostró muy animado en la recogida de árboles de Navidad en el Palacio Real de Estocolmo, pero hubo gestos que mostraron que algo le pasaba.
No son muchas las ocasiones en las que se puede ver a los hijos de Carlos Felipe y Sofia de Suecia al no pertenecer a la Casa Real Sueca. Sí son parte de la Familia Real Sueca y se unen a posados familiares y a actos muy concretos. Además, sus padres publican fotos de sus hijos cuando llegan sus cumpleaños, pero de todos modos, cada vez que aparecen en público todas las miradas se fijan en ellos.
Así ocurrió el lunes 16 de diciembre de 2024 cuando la Reina Silvia apareció acompañada de sus ocho nietos para la tradicional recogida de árboles de Navidad que los estudiantes de la Universidad de Ciencias Agrícolas de Umeå entregan cada año a la Familia Real Sueca desde 1962.Si bien este acto es rotativo, la Reina de Suecia ha repetido fórmula al haber aparecido dos veces seguidas con todos sus nietos. En 2023 se hizo así porque cumplía 80 años, y quizás un año más tarde ha vuelto a ocurrir de esta manera para celebrar que la Princesa Magdalena y Chris O'Neill se mudaron a Suecia con sus hijos, y que por tanto ya están todos los primos juntos.
Sea como fuere, se pudo ver a la Reina Silvia con la Princesa Estelle, elPríncipe Oscar, los Príncipes Alexander, Gabriel y Julian, la Princesa Leonore, el Príncipe Nicolas y la Princesa Adrienne, que decoraron los árboles de Navidad en el Palacio Real de Estocolmo.Ayudado por su abuela y su prima
Se pudo comprobar que algo ocurría con Alexander de Suecia, hijo mayor de Carlos Felipe y Sofia de Suecia, que de vez en cuando colocaba un pie de cierta manera. Se podría pensar que se trataba simplemente de una postura, pero también se le vio cojear un poco y caminar ayudado por su abuela y su prima Estelle, lo que parecía mostrar que algo le ocurría.
Ante la pregunta de Svensk Damtidning a la Casa Real Sueca, la directora de comunicación, Margareta Thorgren, respondió que "el Príncipe Alexander se ha torcido el pie", motivo por el que cojeaba en ocasiones y necesitó ayuda. Eso sí, no tuvo problemas en divertirse con sus hermanos y primos decorando el árbol de Navidad y en posar con su familia, así que parece que afortunadamente la torcedura no reviste gravedad y pronto va a estar completamente recuperado.