Desde que los médicos le dieron el visto bueno para seguir con su agenda, no deja de estar presente en todo lo que puede y más. Además, cumple con sus compromisos de lo más sonriente. Kate Middleton ha acudido a un acto acompañad de su marido el Príncipe Guillermo de Inglaterra, y en esta ocasión han visitado una gran fábrica de automóviles.
A pesar de que su barriguita ya se vaya notando, procura disimularla con vestidos suelto y ahora con el frío con abrigos también anchos y largos. Pero parece que se encuentra de maravilla, porque se atrevió a ponerse al volante de nada más y nada menos que de un todoterreno de grandes dimensiones.
Suscitando críticas
Este gesto, a pesar de que haya sido aplaudido por muchas personas, también ha suscitado mucha polémica, sobre todo por el peligro que puede conllevar para una embarazada y por su posición en la Familia Real británica. Lo que está claro es que se divirtió y mucho en esta nueva aventura para ella. Mientras, también su marido disfrutó montándose en otro coche con características similares.