La Duquesa de Cambridge no termina de estar restablecida de la hiperémesis gravídica que está sufriendo en su segundo embarazo y que le ha obligado por consejo médico a cancelar su agenda oficial de forma indefinida.
Desde que la Casa Real Británica anunció que el Príncipe Guillermo y Kate Middleton estaban esperando su segundo hijo, la Duquesa de Cambridge no ha vuelto a aparecer en público, cancelando incluso su esperado viaje a Malta, que iba a ser su primera salida oficial al extranjero en solitario.
Bien atendida
La Duquesa de Cambridge lo está pasando mal, y por eso según informa la edición británica de Vanity Fair, se ha instalado en casa de sus padres en Buckleberry, donde también estuvo en las primeras semanas de vida de su hijo Jorge.
Allí, Kate Middleton puede estar más tranquila, y aunque pierde las atenciones del servicio que podría tener en Kensington Palace, puede tener el cariño y los cuidados de sus padres, Michael y Carole Middleton.
Ahora habrá que esperar a que la esposa del Príncipe Guillermo recupere la salud y pueda retomar su agenda oficial como miembro de la Familia Real Británica que es, algo para lo que según los cálculos aún le puede llevar unas semanas.