Iñaki Urdangarín interpuso el pasado 15 de abril una demanda por vulneración al derecho a la intimidad contra varios medios de comunicación y su exsocio Diego Torres, en la que pedía que se prohibiera la publicación de una serie de correos electrónicos alegando que podrían tener información que atañerían a su intimidad y la de sus familiares.
El 16 de julio se celebró una vista a puerta cerrada donde las distintas partes expusieron sus alegaciones. Aunque la Fiscalía y el propio Urdangarín pidieron que se mantuvieran las medidas cautelares, la jueza encargada ha levantado la prohibición que impedía difundir y comentar los susodichos e-mails.
En el auto, la magistrada considera que "no se han concretado suficientemente las razones por las que debe limitarse el derecho de información a estos medios y no a otros y por ello estima que la medida solicitada en relación con los medios de comunicación demandados es incierta e ineficaz por cuanto no garantiza que los correos íntimos no se difundan".
Los medios sí, Torres no
La magistrada no se ha creído la versión de Diego Torres que afirmaba no tener ningún correo más de Iñaki Urdangarín. Por lo que ante ante el miedo de que pudiera acceder a ellos y filtrarlos a los medios "y con ello frustrar la protección de la intimidad que se peticiona en la demanda principal, no procede alzar la medida frente a este codemandado", sentencia la jueza.