Por fin ha tenido lugar el juicio en el que Josep Maria Mainat y Angela Dobrowolski se han visto las caras. La todavía mujer del productor comenzó a ser investigada después de que supuestamente intentara asesinar a su marido y ahora el juez ha tomado una serie de decisiones que afectan directamente a Dobrovolski.
El juez la ha prohibido acercarse a su marido y también a sus dos hijos pequeños después de que el productor pidiese una orden de alejamiento. Mientras, seguirá en libertad provisional aunque teniendo en cuenta que tiene la obligación de comparecer todas las semanas ante la autoridad judicial y que se le ha retirado el pasaporte para que no pueda huir del país.
En su salida al juicio el productor ha dicho unas breves palabras sobre Angela Dobrowolski, diciendo: "No la odio", y de momento este juicio ha servido para saber que ella no irá a prisión tal y como solicitaba la Fiscalía, aunque se le hará un informe psicológico. Se considera que no existe riesgo de fuga y el productor está satisfecho con que no la encarcelen y con que hayan decretado que tenga que mantener una distancia mínima de 1.000 metros tanto con él como con los dos hijos que tienen en común.
Mientras que en este primer juicio han prestado declaración tanto Mainat como la acusada, otro día deberán acudir al juzgado para formar parte del interrogatorio los médicos y los trabajadores de la ambulancia que atendieron a la víctima cuando sufrió un coma hipoglucémico por una supuesta inyección de insulina suministrada por su mujer.
Otros asuntos en el aire
Y esta no es la única causa pendiente que tienen en los juzgados, puesto que ella también había sido denunciada por cobrar dos cheques en blanco supuestamente firmados por su marido. Además, han intercambiado denuncias acusándose mutuamente de agresión y será en diciembre de 2020 cuando deberán declarar por una de estas denuncias.