El Príncipe Joaquín se deshizo de la propiedad que tenía al norte de Copenhague. De todos modos, cuando quiera volver de visita tendrá un espacio en Amalienborg a su disposición.
Joaquín de Dinamarca sigue cortando lazos con su país. En 2019 se trasladó a París con su mujer, la Princesa Marie, y sus hijos Henrik y Athena. Durante el primer año realizó un curso organizado por el Ministerio de Defensa de Francia en la Escuela Militar de París. Tras completarlo, pasó tres años como agregado de defensa en la Embajada de Dinamarca en París. Cuando se aproximaba el final, el hijo de la Reina Margarita expresó que él sabía exactamente cómo quería continuar su carrera, esperando recibir una llamada que finalmente se produjo.
Así, desde el 1 de septiembre de 2023 ejerce como agregado de la industria de defensa en la Embajada de Dinamarca en Washington DC. El cargo es por tres años con posibilidad de prórroga, lo que le permite quedarse en Estados Unidos al menos hasta 2026. Quizás entonces regrese a Dinamarca o quizás pueda continuar con lo que parece que es su auténtica pasión.Con un océano de por medio y muchas tensiones familiares, agravadas cuando Margarita de Dinamarca retiró el título de príncipes a cuatro de sus nietos, a los hijos de Joaquín de Dinamarca, esta rama de la dinastía parece querer cortar lazos con el país escandinavo. Eso, y tener mayor liquidez económica es lo que habría llevado al Príncipe Joaquín a vender la residencia que tenía en Klampenborg, al norte de Copenhague.
Como señala SE og HØR, el Príncipe Joaquín ha vendido su casa por 44 millones de coronas, lo que vienen a ser unos 5,9 millones de euros. Obtuvo por tanto un beneficio de 9,5 millones de coronas, 1,30 millones de euros, debido a que había adquirido la propiedad en 2014 por 34,5 millones de coronas danesas, unos 4,6 millones de euros. El comprador es un alto ejecutivo danés que ha pagado casi 6 millones de euros por esta casa de 344 metros cuadrados distribuidos en 9 habitaciones, piscina y un gran jardín.Con los bolsillos llenos
Con esta venta, Joaquín y Marie de Dinamarca se van a Estados Unidos con los bolsillos llenos. Y si bien la Princesa Marie no va a tener asignación en Washington, el Príncipe Joaquín logró una autorización parlamentaria para conservar su apanage, como se llama en Dinamarca al sueldo que reciben los miembros de la Casa Real Danesa, de 500.000 euros anuales. Aunque no participará en actos oficiales, o no en demasiados, se estima que es una renta vitalicia que recibe solo por ser Príncipe de Dinamarca. Eso sí, no obtiene sueldo alguno por su cargo en Washington.
Además de tan importante sueldo, las arcas de Joaquín de Dinamarca no están precisamente vacías. Para muestra, no solo esta venta, sino la que realizó en 2014 cuando vendió el Castillo de Schackenborg por unos 13,5 millones de euros. Esta residencia, que fue un regalo de sus padres en 1978, se convirtió en un quebradero de cabeza para el Príncipe Joaquín, que quiso explotar la propiedad sin éxito. Admitió su fracaso y vendió Schackenborg, lo que calificó como una derrota personal que no quería que experimentaran sus hijos.