Las dos han pasado juntas el duelo por la muerte de su hermano Constantino de Grecia, fallecido el 10 de enero de 2023 a los 82 años, y las dos se han hecho compañía la una a la otra cuando más falta se hacían. La Reina Sofía y la Princesa Irene tienen mucho que agradecerse la una a la otra y las dos sabían que se iban a acompañar y a ayudar pasara lo que pasara.
Doña Sofía fue la primera persona que se dio cuenta de que algo no iba bien: "Fue la primera que advirtió su deterioro cognitivo, no recordaba una fecha, olvidaba cómo se llamaba su interlocutor y, quizás, como en casos similares, pensó que eran despistes propios de la edad".
Desgraciadamente no eran despistes propios de la edad, sino un deterioro cognitivo que ha provocado una pérdida de memoria. Doña Sofía se encarga de que su hermana esté siempre bien atendida, que sienta su cariño y su presencia. Pero no es la única. La Zarzuela entera se ha volcado con Irene de Grecia: "La Zarzuela en estos momentos es un santuario, un refugio para Irene, todo gira alrededor de ella para conseguir privacidad, bienestar y tranquilidad", añade la citada revista.
Los gestos con Irene de Grecia
La Familia Real se desvive por Irene de Grecia, la tía Pecu, a la que todos quieren y a la todos desean ayudar y acompañar. También la Familia Real Griega está ahí para ella, pero la distancia provoca que no puedan darle el mismo apoyo que la Reina Sofía o los sobrinos que están cerca.
Ese cariño de la Familia Real se vio por ejemplo en una de las salidas del verano de 2023 en Mallorca, donde la Reina Letizia estuvo particularmente cariñosa con su tía política. No era fachada, no era para la foto, era porque quería estar pendiente de que Irene de Grecia estuviera cuidada, protegida y se sintiera querida.