Los primeros doce meses en la vida de una persona están llenos de cambios que son apreciados por sus padres y otros familiares y amigos que ven crecer a la criatura. Sin embargo todo cambia cuando este niño está llamado a ser Rey de Inglaterra y de varios países más, ya que los ojos del mundo observan las andanzas y aventuras del bebé en su primer año de vida, y en los restantes que le queden por vivir.
Ha pasado un año desde que nació George Alexander Louis, Alteza Real, Príncipe de Cambridge y tercero en la línea de sucesión al Trono Británico tras su abuelo, el Príncipe de Gales, y su padre, el Príncipe Guillermo. Todo comenzó con el ingreso hospitalario de Kate Middleton en diciembre de 2012, momento en el que se tuvo que anunciar (antes de tiempo), que los Duques de Cambrigde esperaban su primer hijo.
Siete meses más tarde venía al mundo el conocido como 'royal baby', un niño que se resistía a nacer, ya que se le esperaba para mediados de julio, y no vino al mundo hasta el día 22. Ese día la expectación era máxima, y medio mundo miraba al Hospital St. Mary de Londres en el que la Duquesa de Cambridge había ingresado para dar a luz.
Al final de la tarde, la Casa Real Británica emitió un comunicado para anunciar la feliz noticia, el primer hijo de los Duques de Cambridge había nacido el 22 de julio a las 16:24 horas. El bebé, que era un varón, estaba sano y pesó 3,8 kilógramos.
Hubo que esperar tan solo un día para poner cara al bebé. La expectación volvía a estar por las nubes a las puertas del Hospital St. Mary. La puerta se abrió, y se pudo ver por primera vez al Príncipe de Cambridge, cuyo nombre no había sido revelado. Kate Middleton llevaba al niño en brazos, aunque no tardó en pasárselo al Príncipe Guillermo. Ambos comentaron lo felices que eran, y que el bebé tenía buenos pulmones.
Los Duques de Cambridge y su hijo se trasladaron al Palacio de Kensington, donde recibieron la visita de la Reina Isabel II. Posteriormente pusieron rumbo a la casa de los padres de Kate Middleton, donde madre e hijo se quedaron mientras el Príncipe Guillermo estuvo ocupado sirviendo en la Real Fuerza Aérea. Antes de partir se reveló que el bebé llevaría los nombres de George Alexander Louis, aunque sería conocido como Su Alteza Real el Príncipe Jorge de Cambridge.
El primer viaje oficial del Príncipe Jorge
Un mes después de nacer, se hicieron públicas las primeras imágenes oficiales de los Duques de Cambridge y el Príncipe Jorge, tomadas por el padre de Kate Middleton en el jardín de su casa. Previamente, el Príncipe Guillermo dijo que su hijo era guapo y tan pillo como su tío, el Príncipe Harry. Desaparecía así del foco mediático hasta su bautizo, que tuvo lugar el 23 de octubre y ofreció una imagen histórica, la de cuatro generaciones de la realeza británica, algo que no se producía desde los tiempos de la Reina Victoria, tatarabuela de la Reina Isabel.
Y así llegó la Navidad, la primera del Principe Jorge, que pasó entre Sandringham con la Familia Real, y Bucklebury, donde le esperaban los Middleton. En invierno llegó el primer viaje al extranjero de Jorge, que viajó con su madre y otros parientes a Mustique, isla caribeña a la que acuden con asiduidad Kate Middleton con sus padres y sus hermanos. El gran viaje llegaría después y sería oficial, pero antes había que buscar una niñera que sustituyera a Jessie Webb, que cuidó al pequeño en sus primeros meses como favor personal hacia el Príncipe Guillermo, ya que también fue su niñera. La búsqueda fue ardua, pero por fin encontraron a la persona ideal, una palentina llamada María Teresa Turrión Borrallo gracias a la cual, el futuro Rey de Inglaterra hablará español.
Justo antes de marcharse a Australia y Nueva Zelanda, el primer viaje oficial de su vida, el Príncipe Jorge realizó un posado junto a los Duques de Cambridge. El bebé tenía 8 meses y se realizó con motivo del Día de la Madre de Reino Unido. Y por fin llegó el gran viaje. El Príncipe Jorge aterrizó en Nueva Zelanda, y participó en su primer acto oficial mientras jugaba con otros niños. Posteriormente se le vio a su llegada a Australia, donde visitó un zoo, conoció a autoridades y finalmente posó con sus padres antes de tomar el vuelo de vuelta a casa.
Tuvieron que pasar dos meses antes de volver a ver al pequeño. El regreso tuvo lugar en un partido de polo el que se le vio gateando y dando sus primeros pasos. Un mes después y con motivo de su cumpleaños, la Casa Real Británica divulgó tres bonitas imágenes. En la primera de ella apareció caminando como todo un experto, y en las otras dos junto a sus orgullosos padres, los Duques de Cambridge, que ya han podido celebrar junto a su hijo que hace ya un año que vino al mundo.