El 18 de septiembre de 1964, el Rey Constantino II de Grecia contrajo matrimonio en la Catedral Metropolitana de Atenas con la entonces Princesa Ana María de Dinamarca, que tras dar el 'sí, quiero' se convirtió en Reina consorte de los Helenos.
Las celebraciones comenzaron el miércoles con una cena en el Museo de la Acrópolis de Atenas a la que asistió la Familia Real Griega al completo, a excepción de los nietos de los Reyes (los hijos del Príncipe Pablo y los de la Princesa Alexia), que no han estado presentes en los actos junto a sus abuelos.
De los Grecia acudieron la Princesa Alexia, que lució un vestido largo de noche en color gris perla con un lazo rosa, y su marido, Carlos Morales, así como el Príncipe Pablo y su esposa, la Princesa Marie Chantal, con un vestido de encaje gris floreado y un lazo negro con el que volvió a dar una lección de estilo.
El Príncipe Nicolás, tercer hijo de los Reyes, y que reside en Grecia, acudió junto a su esposa, la Princesa Tatiana, que al igual que la Reina Ana María optó por el blanco. No faltaron los hijos menores de los Reyes, la Princesa Teodora, que portó un vestido de noche de color azul celeste, y su hermano el Príncipe Felipe, muy elegante con esmoquin.
La Reina Sofía llegó al Club Náutico acompañada de su hermana, la Princesa Irene de Grecia. Doña Sofía optó por un vistoso vestido verde pastel, mientras que Irene se enfundó un traje azul. Una de las invitadas más esperadas de la noche fue la Infanta Elena, que finalmente apareció; la Duquesa de Lugo resplandeció con un vestido azul y un mantón de manila en azul.
Otros de los asistentes fueron las hermanas de la Reina de Grecia, la Reina Margarita de Dinamarca y la Princesa Benedicta y la hija de esta última, la Princesa Alexandra zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, que llevó a su marido, el Conde Jefferson von Pfeil und Klein-Ellguth. No faltaron algunos primos del Rey Constantino como el Príncipe Ernesto de Hannover, que reapareció tras una larga ausencia, la Princesa Tatiana y su marido, el doctor John Fruchaud, los Príncipes Margarita y Radu de Rumanía y los Príncipes Miguel y Marina de Grecia.
Los Duques de Palma no asistieron a la celebración
Asimismo, los Reyes Simeón y Margarita de Bulgaria, los Príncipes Alexander y Katherine de Serbia, los Condes de Rosenborg, la Archiduquesa Elena de Austria y otros miembros de la realeza y la aristocracia europeas, así como dos Príncipes de Jordania, estuvieron entre los invitados a esta cena que conmemoró el medio siglo de amor de los últimos Reyes de los Helenos.
La gran ausencia vino de la mano tanto de los nietos de los anfitriones como de los hijos de la Reina Margarita de Dinamarca, sobrinos de los Reyes de Grecia. Eso sí, la incomparecencia más destacada fue la de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, ya que mantienen muy buena relación con sus parientes helenos, y su presencia se daba casi por hecha. Sin embargo, prefirieron quedarse en Ginebra y no aparecer en público en una fecha tan especial.