Desde la abdicación del Rey Juan Carlos y la proclamación de su hijo, el "núcleo duro" de la Familia Real se vio modificado y restringido notablemente. Desde entonces la Infanta Elena vio disminuidos notablemente los actos a los que acudía, que se restringieron prácticamente de forma única a los premios de pintura infantil que Patrimonio Nacional entrega anualmente en el Palacio del Pardo.
El pasado viernes 11 de mayo la hermana mayor del Rey Felipe VI volvió a hacer acto de presencia en un acto oficial en Jerez de la Frontera, con motivo de la entrega del Premio Caballo de Oro al Escuadrón de la Guardia Real. Un acto que este año conmemora su 50 aniversario y en el que se premia a este cuerpo porque la mayoría de sus caballos son criados en esta ciudad gaditana.
La Infanta Elena llegó al acto montada en un coche de caballos junto al Coronel Eduardo Diez Monje, al que posteriormente hizo entrega del galardón en compañía de María del Carmen Sánchez, alcaldesa de Jerez de la Frontera. Durante la ceremonia tuvo lugar además una exhibición ecuestre que seguro hizo las delicias de la Duquesa de Lugo, gran apasionada de la hípica.
Mayor presencia en actos no oficiales
Pese a su escasa presencia en actos oficiales, la Infanta Elena no ha renunciado a su agenda privada, ya que es frecuente verla en numerosos encuentros familiares, así como en los actos que organiza la Fundación Mapfre. Su trabajo al frente del área social de este organismo es a día de hoy una de las principales fuentes de ingresos de la exesposa de Jaime de Marichalar y por el cual percibe una cifra que rondaría los 200.000 euros anuales.