La Infanta Cristina abandonó su exilio dorado en Ginebra para pasar un fin de semana en Madrid, la ciudad en la que nació y vivió durante su infancia y adolescencia, y donde vive su familia. Allí, la Duquesa de Palma aprovechó para pasar tiempo con su madre, la Reina Sofía, a la que adora y que ha sido su mejor apoyo desde que estalló el Caso Nóos.
En el cumpleaños de Cristina de Borbón-Dos Sicilias
Cristina de Borbón no vio solo a su madre, sino que también se encontró con su hermana, la Infanta Elena, con Carlos García Revenga y su prima Cristina de Borbón-Dos Sicilias, que celebró su cumpleaños este fin de semana e invitó a la Infanta Cristina. A quien no vio fue a los Reyes Felipe y Letizia ni al Rey Juan Carlos.
Además de eso tuvo tiempo para las compras. El sábado por la mañana quedó con una amiga y la hija de esta para irse de compras a un centro comercial de La Moraleja, lujosa urbanización al norte de la ciudad de Madrid. Cristina de Borbón no hizo mucho gasto y solo se llevó una camisa a un precio de 50 euros.