La Infanta Cristina declara como imputadaEste viernes, la Audiencia de Palma notificará su decisión de si mantiene o no la imputación de la Infanta Cristina por delito fiscal y blanqueo de capitales. Horas antes, Informativos Telecinco desvela que pase lo que pase, la hija del Rey Juan Carlos tendrá dos trances que pasar por su implicación en la causa.
Y es que la Fiscalía Anticorrupción pedirá a Cristina de Borbón en torno a 500.000 euros (podrían ser más) en concepto de responsabilidad civil. Además de eso, tendrá que testificar en el juicio que se celebrará próximamente, y donde sí estará acusado su marido, Iñaki Urdangarín.
La Infanta Cristina sonríe antes de entrar a declararEl fiscal Pedro Horrach, que se enfrentó con el Juez Castro al considerar que no tenía argumentos para imputar a la Duquesa de Palma, sí tiene claro que ha ofendido el artículo 122 del Código Penal, que señala que "el que por título lucrativo hubiere participado de los efectos de un delito o falta, está obligado a la restitución de la cosa o al resarcimiento del daño hasta la cuantía de su participación".
Además de esta multa que deberá afrontar por su responsabilidad en Aizoon, la Infanta Cristina tendrá que ir a juicio sea cual sea la decisión de la Audiencia de Palma, aunque se le retirara la imputación, solo lo haría como testigo junto a los responsables de las otras 10 sociedades que se llevaron dinero del Instituto Nóos.
Los escenarios posibles
Con todo ello, este viernes es un día clave para la Infanta Cristina. Si la Audiencia de Palma desestima el recurso que la defensa de De Borbón interpuso ante la imputación que le adjudicó el juez instructor, la Infanta tendría que sentarse en el banquillo de los acusados para responder por un delito de blanqueo de capitales y dos delitos fiscales.
La Infanta Cristina sale de declarar con una sonrisaOtra situación se daría si se estimara parcialmente el recurso. Si se estima para los delitos fiscales, tendría que responder por el blanqueo de capitales, enfrentándose a una pena de dos años de prisión. Si se estima el recurso contra el blanqueo pero no contra los delitos fiscales, el afectado sería el Estado español, por lo que la acusación vendría de la Fiscalía y la Abogacía del Estado. Esta posibilidad sería positiva para la Infanta, ya que ambas están de acuerdo en que De Borbón no debería estar imputada. Finalmente, si se admite el recurso en su totalidad, la Infanta estaría desimputada, y tendría que pagar la multa y testificar en el juicio, sin duda la mejor opción para la que durante 49 años fue miembro de la Familia Real Española.
