Galería: Juicio por el Caso Nóos
El Tribunal Supremo dará a conocer su respuesta al recurso presentado por las partes del Caso Nóos muy pronto, o eso se espera. Aunque se decía que el fallo era inminente, la agonía sigue y hace mella sobre todo en los condenados, que siguen creyendo que hay esperanza para ellos. La decisión está en manos de la Justicia.
La Infanta Cristina no está llevando nada bien la espera. Ella está absuelta y no hay más acusaciones contra su persona, pero Iñaki Urdangarin se la juega porque está condenado a 6 años y 3 meses. Él pide la absolución, pero la Fiscalía solicitó en su recurso al Supremo que la condena se eleve hasta los 10 años.
El exjugador de balonmano lo está pasando mal, pero ella se siente dolida, frustrada y está deprimida. Al menos según Vanity Fair es lo que está sintiendo la hermana del Rey, o eso dicen dos personas cercanas a ella que han querido revelar el estado de ánimo de Cristina de Borbón.
La Infanta Cristina sogue pensando que tanto ella como Iñaki Urdangarin son las víctimas de esta situación y le frustra que la ciudadanía no entienda que lo que explicó el que fuera Duque de Palma, que no pensaba que estuviera cometiendo irregularidades y delitos en su actividad profesional. Está dolida, indignada por el infierno que llevan casi 7 años viviendo y sigue culpando a Diego Torres por haber arrastrado a Iñaki Urdangarin.
La Infanta Cristina y sus hijos se quedan en Ginebra
Además, el matrimonio no tiene pensado qué hacer en caso de que el yerno de Juan Carlos I sea encarcelado, es un escenario en el que no quieren ponerse. De hecho, no saben cómo van a hacer, aunque sí tienen claro que la Infanta Cristina y sus hijos se van a quedar en Ginebra.