A la Infanta Cristina la fortuna le sonríe. Tiene dos trabajos muy bien remunerados y con una gran flexibilidad, tanto que aunque tiene que viajar mucho por cuestiones profesionales, le permiten realizar numerosos viajes a España que no siempre están justificados por causas laborales.
La Infanta Cristina entra a la boda de Pepe Treviño y Paula Fernández MartínezAdemás, le espera la cuantiosa e incalculable herencia del Rey Juan Carlos, su padre, que se tiene que repartir con la Infanta Elena porque el Rey Felipe VI renunció a ella y deberá cumplir cuando llegue el momento.
Sigue viviendo en Suiza
Económicamente puede estar tranquila, y sin propiedades a su nombre, que se sepa, porque en Ginebra está de alquiler, en Barcelona se alojaba en un hotel y en Madrid se queda en el Palacio de La Zarzuela, ha optado por comprarse una propiedad en la ciudad condal.
La Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin paseando por BarcelonaAsí lo desvela Lecturas, que señala que se ha comprado, nada más y nada menos que el piso en el que vivió en el barrio de Pedralbes de Barcelona con Iñaki Urdangarin antes de adquirir el mal llamado Palacete de Pedralbes. Parece ser aquella casa de 300 metros cuadrados que no gustó al Rey Juan Carlos, que espetó a su entonces yerno que como podía tener a su hija viviendo en un piso después de haber crecido en un palacio.
Esta vivienda de, para ser exactos, 305 metros cuadrados, tiene 4 habitaciones, 3 baños, trastero y 2 plazas de garaje y fue de los Urdangarin de Borbón hasta 2004. Por ello, allí vivieron en los primeros años de su matrimonio y allí pasaron sus primeros años de vida sus hijos Juan, Pablo y Miguel. Y es precisamente uno de ellos, Pablo Urdangarin, el que según Vanitatis va a vivir allí de forma permanente.
Pablo Urdangarin besa a la Infanta Cristina en un partido de balonmanoLa idea, o es lo que ha deslizado el entorno de Cristina de Borbón, es que allí viva el jugador de balonmano, que milita en el BM. Granollers, y que sea un punto de reunión para el resto de la familia en sus visitas a Barcelona. Es decir, se acabaron los hoteles para la Infanta Cristina, que viaja a la capital catalana con mucha frecuencia.
Esta casa se compró por 480.000 euros en su momento y la vendieron por 2 millones de euros, y aunque no se sabe lo que le ha costado ahora, no parece que haya tenido que desembolsar menos que eso. Para ello, ha pedido una hipoteca a 15 años con el banco para el que trabaja, aunque a buen seguro habrá podido entregar una buena cantidad también.
La Reina Sofía, Irene de Grecia y la Infanta Cristina en la procesión del Cristo de los Alabaderos en MadridPor otro lado, desde la revista ¡Hola! se ha puntualizado que la Infanta Cristina no se muda a España. Si bien sus visitas a España se han intensificado desde su separación de Iñaki Urdangarin, no tiene previsto mudarse a su país y seguirá siendo residente fiscal en Suiza, donde se instaló en 2013. Para sus viajes a Barcelona se acaban ya los hoteles, y en Madrid se queda en el Palacio de La Zarzuela, donde han residido de forma temporal sus hijos Miguel e Irene Urdangarin, y donde ella misma pasa muchas temporadas con la Reina Sofía e Irene de Grecia.
