El septiembre de 2019, Iñaki Urdangarin entró como voluntario en el Hogar Don Orione de Pozuelo de Alarcón, por lo que ya ha podido recibir su primera evaluación por parte del centro, un informe en el que se cuenta a prisión cómo se está comportando el voluntario. Así, se ha podido saber que el exbalonmanista ha sacado un 'notable alto' en la evaluación. Ante esta nota, muchos se han preguntado por qué no ha conseguido un 'sobresaliente', y la revista Lecturas ha conversado con el director del centro, Francisco Sánchez, para saber los motivos de esta valoración.
Primera imagen de Iñaki Urdangarin tras su ingreso en prisiónAsí, el centro ha evaluado su actitud y sus trabajos, algo que es normal en este entorno. Los presos acuden a este tipo de centros para hacer trabajos comunitarios y, consecuentemente, ellos tienen que valorar su actitud, algo bastante relevante para saber la actitud del preso. Entre las situaciones a valorar se tiene en cuenta la puntualidad, predisposición, su posición, manejo... Parece ser, además, que esta vez, la directora de la cárcel de Brieva ha pedido que esta 'colaboración' sea mensualmente, aunque de manera normal los presidarios suelen estar 15 días.
Una actitud más relajada que al principio
Es por ello que este cambio llevado a cabo por el centro penitenciario hace que no se sepa hasta cuándo acudirá el marido de la Infanta Cristina a este voluntariado, por lo que de momento, los informes se harán mensualmente. Respecto a su nota, Francisco Sánchez, director del centro, ha confesado que se debe a que son "exquisitos" para poner la máxima nota. Al haber ocho evaluadores, no todos coincidían con el exjugador de balonmano en el día a día, por lo que marcaban "no sé, no contesta" en algunas preguntas, algo que alejaría la evaluación de la excelencia.
Iñaki Urdangarin llegando al Hogar Don OrioneTambién, para conseguir esa 'matricula' se necesitarían algunas mejoras en cuestiones técnicas, algo que Urdangarin necesitará practicar. Tan solo han sido ocho días de aprendizaje, por lo que es normal que su manejo no sea perfecto. De hecho, las fisioterapeutas del centro han sido las más "críticas", ya que él no ha estudiado eso y necesitaría aprender. Por su parte y respecto a la actitud, el director ha recalcado que se le ve "risueño y tranquilo", mucho más relajado que en las primeras ocasiones y ganándose una buena relación con los compañeros.
