Aunque el exjugador de balonmano estaba en libertad condicional y hacía vida normal, no había cumplido la totalidad de una condena que por fin ha terminado.
La Audiencia de Palma condenó a Iñaki Urdangarin a 6 años y 3 meses de cárcel y una multa de 512.000 euros por los delitos de malversación, prevaricación y falsedad documental, fraude a la administración, tráfico de influencias, y dos delitos fiscales, además de 7 años de inhabilitación en una sentencia que se conoció el 17 de febrero de 2017.
Tras recurrir, el Tribunal Supremo rebajó su condena cinco meses, dejándola en cinco años y 10 meses de prisión al retirarle un delito de falsedad documental. El 18 de junio de 2018 ingresó en el centro penitenciario de Brieva, Ávila, donde permaneció solo en el módulo de hombres, vacío al ser la de Brieva una cárcel de mujeres.El 9 de abril de 2024 terminó la condena de Iñaki Urdangarin, que es plenamente libre. El exjugador de balonmano recibió ese día en el centro penitenciario de Zaballa el llamado licenciamiento definitivo, si bien hace ya tiempo que Urdangarin llevaba una vida que podía considerarse normal. Pasó año y medio en Brieva hasta que en enero de 2021 ingresó en el centro de inserción social Melchor Rodríguez García de Alcalá de Henares, donde apenas pasó una pocas semanas.
No tardó en trasladarse a Zaballa al reconocerse el arraigo familiar que tiene en Vitoria, donde viven su madre y algunos hermanos y sobrinos. Entró en régimen de semilibertad por el que podía trabajar por el día y solo ir a la cárcel a dormir. Tras haber sido voluntario en la ONG Hogar Don Orione desde septiembre de 2019 y mientras estuvo en Brieva, fue contratado en Imaz&Asociados, donde conoció a la que después fue su pareja, Ainhoa Armentia. El descubrimiento de esta relación en enero de 2022 supuso su ruptura con la Infanta Cristina, con la que se había casado en 1997 y con la que tuvo cuatro hijos. En marzo de 2022 obtuvo la libertad condicional. Lo que no puede hacer en 5 años
Iñaki Urdangarin, que durante su condena realizó un programa para condenados por delitos económicos, es un hombre libre, pero para dejar atrás los antecedentes penales en su expediente deben pasar otros 5 años. En ese tiempo no puede volver a cometer delito alguno, y tampoco se le permitirá en ese periodo ser miembro de un jurado, realizar determinados voluntarios o ejercer ciertos trabajos, ni tener perros peligrosos.