A la espera del tercer grado
Iñaki Urdangarin realiza un voluntariado en Hogar Don Orione para ayudar a personas con diversidad funcional que acuden a este centro ubicado en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón. Lo hace con permiso judicial desde septiembre de 2019. Comenzó yendo dos días por semana, pero se le dio autorización para acudir tres veces por semana.
Aunque se ha quedado sin poder salir del centro penitenciario en el que cumple condena desde el 18 de junio de 2018, solo es un paréntesis dentro de esta actividad que resulta tan beneficiosa para Hogar Don Orione y también para el propio Urdangarin, que ha encontrado en el voluntariado una forma de ayudar y de paso llevar la condena mejor hasta que cumpla los 5 años y 10 meses que le impuso el Supremo.
Además, espera la concesión del tercer grado, solicitud que le concedió el juez de Vigilancia Penitenciaria 1 de Castilla y León, pero que rechazó la Audiencia de Palma ante el recurso presentado por la Fiscalía. En ese momento también se le negó un permiso para salir de la cárcel un fin de semana al mes. Pese al varapalo, tan solo es una cuestión de paciencia. En mayo de 2021 habrá cumplido la mitad de su condena y podrá optar al tercer grado.