Todo se precipitó cuando en enero de 2022 la revista Lecturas publicó unas imágenes del exjugador de balonmano junto a una mujer que no era la Infanta Cristina, con la que se le vio en actitud cariñosa en el País Vasco Francés.
Las tomó una persona que le reconoció y que vendió las fotos. Al publicarse, estalló un enorme escándalo que acabó con el matrimonio de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, que en un comunicado hablaron de "interrumpir su relación matrimonial", una forma de decir que se separaban.
Quieren una boda discreta
En diciembre de 2023 se divorciaron, algo que Ainhoa Armentia ya había hecho anteriormente del padre de sus hijos. Ya con este horizonte despejado, comenzaron a pensar en boda, algo que maduraron a lo largo de 2024. Así, como señaló Marisa Martín Blázquez en 'Fiesta', la pareja quiere casarse y hacerlo en una boda discreta, con poca gente, algo que en nada se iba a parecer a la gran boda real de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin.
Y aunque no se sabe si hay fecha, sí se lo han contado a sus hijos. La presentación de Ainhoa Armentia a Juan, Pablo, Miguel e Irene cuando se vieron todos en fin de año en Vitoria, no era solo para que todos se conocieran, que también, sino para que el exjugador de balonmano desvelara a su vástagos su intención de contraer matrimonio.
Algunos se lo tomaron mejor que otros. Pablo Urdangarin, que fue el que convenció a sus hermanos para que conocieran a Ainhoa Armentia, con la que él ya había estado, se lo tomó bien. Miguel nunca a va ser beligerante con su padre, mientras que Juan e Irene Urdangarin lo llevan peor. De todos modos, la felicidad de su padre pasa por Ainhoa Armentia, así que es posible que terminen aceptando esta boda.