La Princesa Leonor y la Infanta Sofía se enfrentan a un nuevo curso separadas. La Princesa ya marchó a Gales, tras las vacaciones familiares, donde comenzó el curso el 26 de agosto. A la Infanta Sofía aún le quedan unos días de descanso, ya que no empieza cuarto de la ESO hasta el 8 de septiembre. Sin embargo, aunque todavía le queda un año por delante ya tiene muy claro su futuro.
La Princesa Leonor y la Infanta Sofía en un paseo familiar por Palma durante sus vacaciones en MallorcaSegún ha informado una fuente amiga de la familia quiere seguir los pasos de su hermana con sus estudios: "Lo tiene clarísimo, solo con las cosas que le cuenta su hermana se muere de ganas por ir también a Gales, pero es que la gente se cree que es muy fácil, pero las pruebas para entrar y la media que te piden de notas es muy complicada", ha explicado a EL ESPAÑOL.
Para poder acceder a las pruebas que comienzan en febrero de 2023, la Infanta debe empezar a prepararse. El primer paso es una preselección anónima donde pasará por una evaluación del profesorado y exalumnos de UWC. Así, son varios los criterios que se tendrán en cuenta, como el compromiso social, la madurez o la capacidad de convivir y hacer amistades. Algo que puede resultar más complicado para la Infanta ya que, como ha explicado la fuente, es una niña más tímida que su hermana.
La Princesa Leonor se despide con un efusivo abrazo de su hermana la Infanta SofíaTras pasar esta fase formará un grupo con los 50 niños de cuarto de la ESO que vivan en España donde las pruebas aumentarán en nivel y en cantidad. Si pasa la fase, la Infanta se tendrá que enfrentar a una prueba escrita de cultura, una entrevista personal, un test psicológico y exponer un proyecto social. De ahí, 25 estudiantes pasarán a la prueba final, que incluye un debate entre todos ellos y una última entrevista personal.
Podrían estar separadas
Sin embargo, de pasar todas las fases, la Infanta podría volver a acabar lejos de su hermana, ya que el UWC tiene 18 colegios entre ellos el lugar en el que estudio su padre, Canadá, por lo que podría optar a una plaza en cualquiera de ellos. Una posibilidad que no haría mucha gracia a la Infanta, que tendría que volver a pasar otros dos años más lejos de la Princesa, algo que ya ha sido muy duro para ella este primer año.
