Galería: La Familia Real Sueca en imágenes
Mientras otras Familias Reales tienen problemas en las relaciones entre sus miembros, no parece que ocurra en el caso de los Bernadotte. No quiere decir que todo sea idílico, pero sí hay bastante armonía, sobre todo entre alguno de sus miembros, lo que se dejó ver en la celebración de la Porsche Carrera Cup Scandinavia en Mantorp Park.
Carlos Felipe de Suecia es un piloto experto que suele participar en las competiciones de STCC. En este 2022 además logró una victoria que saboreó acompañado de algunos de sus familiares más directos, testigos de la gesta del Duque de Värmland, un apasionado de los coches que heredó esta afición de su padre y de su tío abuelo Bertil de Suecia.
Mujer, hijos, padre, suegra y primo
Fue precisamente su padre, el Rey Carlos XVI Gustavo, uno de los testigos de su victoria. El Monarca, muy unido a su hijo mediano, siguió la carrera junto a Sofia de Suecia, que nunca falta a la Porsche Carrera Cup Scandinavia en Mantorp Park para animar al Príncipe Carlos Felipe. Además, llevó con ella a dos de sus hijos, el Príncipe Gabriel y el Príncipe Julian, así como a su madre, Marie Hellqvist, que animó también a Carlos Felipe de Suecia.
Mientras el Príncipe Alexander, el mayor de los Värmland, no acudió a esta carrera, sus dos hermanos se convirtieron en auténticos protagonistas. Julian de Suecia lo hizo por lo simpático que estuvo, y también porque ya se va haciendo mayor. No es muy habitual ver al Duque de Halland en un acto público, por lo que fue la ocasión perfecta para ver cómo ha ido creciendo y que ya se pone de pie.
Y para celebrar la victoria, Carlos Felipe de Suecia se puso cariñoso con Sofia de Suecia, a la que besó, y con sus hijos, con los que estuvo muy atento y divertido, sobre todo con su hijo Gabriel, que estaba encantado con su padre tras la celebración de esta carrera automovilística.
También fue felicitado con mucho cariño por su primo, Patrick Sommerlath, sobrino de la Reina Silvia, siempre unido a la Familia Real Sueca y más desde su divorcio, lo que provocó que los Bernardotte se volcaran con él en sus momentos más complicados.