Cristina de Borbón pudo aprovechar que por motivos de seguridad se le permite usar el parking, así que ha logrado ver a su marido y al mismo tiempo no dar la foto que tanto quería evitar Casa Real. No ha habido imágenes, y parece que no las va a haber.
¿Habrá visita de sus hijos?
O no tuvieron tanta suerte con sus peticiones, o directamente se limitaron a hacer como el resto de familiares de la población reclusa y se dejaron fotografiar para que todo el mundo vea que siguen arropando a Iñaki Urdangarin, su querido hermano y cuñado, al que llevan años respaldando.
Se supone que días atrás había acudido también Claire Liebaert, madre del exjugador de balonmano, aunque como en el caso de Cristina de Borbón, no hay foto alguna que acredite su presencia en Brieva. Lo que va a ser muy complicado es ver a sus hijos, ya que se supone que la pareja tiene el pacto de que no vayan a verle a la cárcel, produciéndose el reencuentro cuando Urdangarin reciba su primer perm¡so penitenciario, lo que podría tener lugar en Navidad de 2019.