Desde que saltó el escándalo, Mette-Marit de Noruega ha preferido no decir nada, o mejor dicho, declarar que no iba a manifestarse sobre su hijo. Sí ha hablado más el Príncipe Haakon, que reconoció que se encontraban ante un asunto serio. Además, durante el viaje oficial que realizó a Jamaica como embajador de buena voluntad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), ofreció declaraciones en dos ocasiones sobre el Caso Marius.
En declaraciones a NRK tras la tercera detención de Borg Høiby, el Principe Heredero comentó: "Marius se enfrenta a acusaciones graves. Por supuesto, pensamos en todos los afectados. Me hubiera gustado estar hoy en casa con Mette. La extraño". Además, una vez fue acusado de dos presuntas violaciones, Haakon de Noruega volvió a ofrecer unas palabras: "Creo que Marius se enfrenta a acusaciones graves y que corresponde a la policía y al sistema judicial ocuparse de ellas. Tengo confianza en que harán un buen trabajo".
Preocupados por Marius
Preguntado sobre cómo la familia había tratado de ayudar a Marius, el Príncipe Haakon expresó a NRK: "A nosotros, como familia y como padres, nos preocupaba que Marius recibiera ayuda, trabajamos durante mucho tiempo para llegar a un lugar donde obtener más ayuda para la rehabilitación y el tratamiento. Es algo a lo que nosotros mismos damos alta prioridad. Esto debe realizarse dentro del marco establecido por el aparato legal".
Finalmente lamentó que esto le hubiera pillado lejos de Noruega: "Siento que estoy lejos de casa, pero pronto subiré al avión y espero volver a casa y estar con mi familia". Horas después tomó un vuelo y regresó a Noruega, donde se reencontró con la Princesa Heredera en Skaugum. Mientras tanto, se decretó que Marius Borg Høiby debía permanecer una semana en prisión preventiva.