La familia al completo contó con la ayuda de dos jugadores profesionales. De esta forma, el equipo 'real' vestido con la equipación de la selección noruega de fútbol se enfrentó a un grupo de jóvenes discapacitados. A pesar de los dos goles que marcaron los hijos del matrimonio, la Princesa Ingrid Alexandra y el Príncipe Sverre Magnus, finalmente acabaron ganando sus oponentes.
Lo cierto es que el heredero al trono y su mujer mostraron mucha complicidad durante el encuentro. De hecho ambos fueron vistos chocando las manos para celebrar un gol e incluso se les vio compartiendo tácticas de juego con sus hijos; dando muestra de la cercanía que existe entre ellos.
Ya recuperada
El partido apenas duró unos 30 minutos. Sin embargo, durante el mismo se ha podido ver a una ya repuesta Mette-Marit después de la operación a la que tuvo que someterse en marzo. Y es que la mujer de Haakon de Noruega declaró padecer el Síndrome de los Cristales; una patología que la obligó a suspender en más de una ocasión sus compromisos profesionales.