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La Casa Real Noruega emitió un comunicado para anunciar que el Príncipe Haakon y la Princesa Mette-Marit se despiden de la casa de veraneo a la que solían ir con sus hijos durante años, una propiedad situada en la isla de Dvergsøya, en Kristiansand, en el sur de Noruega: "Su Alteza Real el Príncipe Heredero y Su Alteza Real la Princesa Heredera han finalizado su contrato de arrendamiento de la propiedad de Dvergsøya, en Kristiansand. El Príncipe Heredero informó al alcalde de Kristiansand, Jan Oddvar Skisland, sobre esto", señala el comunicado emitido.
"La pareja heredera ha apreciado mucho tener la oportunidad de pasar sus vacaciones en el archipiélago de Kristiansand durante muchos años", señala la nota, que incluye unas palabras de Haakon y Mette-Marit de Noruega, que agradecen los felices veranos de los que disfrutaron en Dvergsøya.
" Los veranos en Dvergsøya nos han dado muchos buenos recuerdos. Agradecemos al municipio por el apoyo que nos ha dado y por la oportunidad de pasar las vacaciones en un entorno tan maravilloso. También ha sido agradable que nuestros hijos hayan tenido esta conexión natural con el sur de Noruega y Kristiansand", señalaron los Príncipes Haakon y Mette-Marit de Noruega.
Por su parte, el alcalde señaló: "El Príncipe Heredero y la Princesa Heredera han disfrutado de partes de Dvergsøya al mismo tiempo que ha sido accesible al público. La familia del Príncipe Heredero ha formado parte del entorno de la zona durante el verano, algo que hemos apreciado. Siempre tenemos la puerta de nuestro corazón abierta a la Familia Real. Me gustaría agradecer a la pareja heredera por su buena y constructiva cooperación y espero que tengan nuevos y buenos recuerdos en su nuevo lugar de veraneo".
Más de 10 veranos en Dvergsøya
La pareja heredera ha pasado sus vacaciones estivales, o al menos parte de ellas, en Villa Vogts, una residencia situada en la isla de Dvergsøya que fue levantada en 1917. En noviembre de 2009 el ayuntamiento de Kristiansand aprobó por 11 votos a favor y 2 en contra que Haakon y Mette-Marit de Noruega pudieran alquilar la citada residencia para disfrutar de sus vacaciones. El plan nunca fue comprar, sino que han alquilado durante más de una década este lugar por un precio estipulado por el ayuntamiento, que al aceptar a la pareja heredera tuvo que restringir el acceso a la isla por motivos de seguridad, si bien nunca hubo una prohibición total de la entrada, como dejó claro el alcalde de Kristiansand.