Galería: La Familia Real Danesa en imágenes
El 4 de junio de 2022 es un día muy importante para la Familia Real Británica por dos motivos. El primero es debido a que en esa jornada tienen lugar parte de los actos centrales por el Jubileo de Platino de la Reina Isabel. El segundo es que ese día cumple un año Lilibet Diana, segunda hija del Príncipe Harry y Meghan Markle, quinta nieta del Príncipe Carlos y decimoprimera bisnieta de la Reina.
Es un día muy ajetreado para la Familia Real Británica, pero no lo será menos para la Familiar Real Danesa y para la Familia Real Griega porque en esa jornada se van de boda. El 4 de junio de 2022 se casa el único sobrino varón de la Reina Margarita de Dinamarca que faltaba por contraer matrimonio : el Príncipe Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg.
Una cláusula nazi abolida
El hijo de Benedicta de Dinamarca y el fallecido Príncipe Richard zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg se casa por fin con la que ha sido su pareja durante 19 años, Carina Axelsson, una mujer sin sangre real, morena, nacida en Estados Unidos y con orígenes suecos y mexicanos que trabajó como modelo y es escritora. Para la Familia Real Danesa esto nunca ha sido un problema, y tampoco para los zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, o al menos no para la familia paterna que conoció a Axelsson.
Si tanto han tardado en casarse ha sido por una cláusula establecida en el testamento del abuelo del Príncipe Gustav, que obligaba a sus herederos, si querían seguir siéndolo y conservar las propiedades de la dinastía, a casarse con unas exigencias hacia la esposa. Gustav, quinto Príncipe de Sayn-Wittgenstein-Berleburg, desapareció en Bielorrusia cuando luchaba con los nazis en la II Guerra Mundial. No se le declaró muerto hasta que nació precisamente su nieto Gustav, hijo de Richard zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Benedicta de Dinamarca. En 1939 había dejado un testamento en el que exigía a su heredero que se casara con una mujer aria, noble y protestante, algo que sí cumplió el Príncipe Richard, pero no su hijo, convertido en el séptimo Príncipe de Sayn-Wittgenstein-Berleburg en 2017 a la muerte de su padre.
Precisamente su acceso completo al título y a las propiedades tras la muerte de su padre ha terminado posibilitando su boda debido al intento de un pariente, el Príncipe Ludwig Ferdinand, de hacerse con el control de la herencia familiar. El Príncipe Gustav ganó a su pariente y además logró que se invalidaran las cláusulas nazis establecidas por su abuelo, por lo que ya no había impedimentos para que Gustav y Carina puedan casarse.