Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Carina Axelsson esperan su primer hijo por gestación subrogada

El 4 de junio de 2022 se celebró la boda del Príncipe Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Carina Axelsson en una ceremonia celebrada en el Castillo de Berleburg, Alemania, residencia de la dinastía, ante unas 80 personas. Un día antes había tenido lugar la boda civil, a la que la asistencia bajó a la mitad. De este modo, el jefe de la dinastía zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg por fin contraía matrimonio con la que llevaba siendo su pareja desde hacía casi dos décadas.

Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Carina Axelsson en su boda

Debido a que la Princesa Carina tenía más de 50 años, no se esperaba que tuvieran hijos. Sin embargo, el Castillo de Berleburg ha sorprendido al emitir un comunicado en el que anuncia que los Príncipes Gustav y Carina sí van a ser padres.

"El Príncipe Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y la Princesa Carina esperan un hijo para principios del verano", señala una nota en la que se detalla que será por gestación subrogada. Se añade que se dará más información a su debido tiempo, lo que probablemente no llegará hasta el nacimiento.

Margarita de Dinamarca, Benedicta de Dinamarca y Ana María de Grecia con sus hijos, yernos y nueras en Gråsten Slot

Este bebé, llamado a ser heredero de la dinastía, será el primer hijo de Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Carina Axelsson, así como el quinto nieto de Benedicta de Dinamarca y Richard zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, que ya eran abuelos de Federico e Ingrid de Pfeil y Klein-Ellguth, hijos de la Princesa Alexandra, y de Constantino y Luisa Johannsmann, vástagos de la Princesa Nathalie. El bebé es además sobrino nieto de la Reina Margarita de Dinamarca y de la Reina Ana María de Grecia, así como, que se sepa, el primer royal baby nacido por gestación subrogada. Y precisamente la Casa Real Danesa ha hablado a través de su directora de comunicación, Lene Balleby, que ha señalado que la Familia Real está muy feliz por la pareja.

Una larga lucha para poder casarse

Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Carina Axelsson se conocieron en una cena con amigos comunes en 2003. Como contó el hijo de la Princesa Benedicta a BILLED-BLADET, fue una especie de cita a ciegas de la que ambos sabían nada. La cosa funcionó y comenzaron una relación que se conoció en 2004. En 2006, el Principe Gustav llevó a Carinna a una boda familiar y en cuanto pudieron, ella se trasladó a vivir al Castillo de Berleburg.

Gustav zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Carina Axelsson

Lamentablemente para ellos, no podía haber boda tan fácilmente. Como heredero de la dinastía zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, la esposa que tomara debía ser aria, noble y protestante, mientras que Carina era de origen mexicano, católica y plebeya. El motivo de esta discriminación era el testamento del abuelo de Gustav, desaparecido en Bielorrusia cuando luchaba con los nazis en la II Guerra Mundial, que especificaba qué normas debían cumplir las consortes si los herederos querían seguir siéndolo y conservar las propiedades de la dinastía.

Pese a que el testamento era de 1939 y estaba marcado por la ideología nazi del Príncipe Gustav Albrecht zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, hubo una larga lucha por invalidarlo, al tiempo que el hijo de Richard zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg y Benedicta de Dinamarca litigaba contra el Príncipe Ludwig Ferdinand, que le disputaba la herencia familiar. Tras obtener la victoria en 2020, Gustav y Carina tuvieron vía libre para casarse. Un año después de su boda y en el 20 aniversario del comienzo de su historia de amor, serán padres.