Con la llegada del verano, medio mundo se marcha de vacaciones y entre ellos podemos destacar a miembros de la Familia Real holandesa que este año han elegido la localidad italiana de Tavarnelle, cerca de Florencia, para pasar unos días de descanso, alejados del mundanal ruido.
Este viaje ha comenzado tras la asistencia de los herederos de los Países Bajos al fastuoso enlace religioso de los Príncipes Alberto y Charlene de Mónaco en Monte-Carlo que tuvo lugar este sábado y al que asisitieron representantes de todas las Casas Reales salvo la española, la griega y la búlgara.
Las Princesas Catharina-Amalia, Alexia y Ariane, grandes protagonistas
En su primer día, tanto la Reina Beatriz como su hijo, el Príncipe Guillermo y su nuera, Máxima de Holanda, así como las tres hijas del matrimonio posaron para la prensa en unas imágenes de lo más familiares y divertidas.
Las grandes protagonistas fueron las pequeñas princesas Catharina-Amalia, Alexia y Ariane, que jugaron y se divirtieron ante las cámaras y ante la atenta mirada de sus progenitores, que se sienten inmensamente felices con la familia que han formado.
Destacar que la localidad de Tavarnelle Val di Pesa es un pueblo situado a 20 kilómetros de Florencia. Sus orígenes son romanos y en su época medieval fue apeadero de carrozas. Se trata de un lugar de enorme belleza y una gran tranquilidad, pues está rodeado de bosques y colinas, por lo que allí van a encontrar la paz que tanto ansiaban.