Tres días antes de cumplir 75 años, la Reina Beatriz I de Holanda se dirigió a la nación en un mensaje por radio y televisión en el que anunció que cedía la Corona a su hijo primogénito y heredero Guillermo Alejandro. Su decisión no ha sorprendido, pues Beatriz ha elegido el mismo camino que un día tomaron su abuela y su madre, traspasar el Trono en vida.
"No abdico porque mi tarea no me satisfaga, sino porque tengo la convicción de que la responsabilidad de nuestro país debe recaer ahora en manos de una nueva generación. Es con la mayor confianza con la que el próximo 30 de abril cederé el Reino a mi hijo, el Príncipe de Orange. Él y la Princesa Máxima están completamente preparados para sus futuras funciones. Ambos sirven a nuestro país con dedicación, con fidelidad a la Constitución y ponen su talento al servicio del Reino", manifestó la Reina en su discurso.
Guillermo de Holanda, el primer rey de su generación
De este modo, el Príncipe Guillermo se convertirá en Su Majestad el Rey Guillermo Alejandro de Holanda el 30 de abril de 2013, día en el que se hará efectiva la abdicación de Beatriz I, y por tanto fecha en la que será coronado Guillermo. Con esta ceremonia, que el Gobierno ha anunciado que será sobria, la Reina Beatriz dará carpetazo a 33 años de reinado que comenzaron precisamente un 30 de abril.
Guillermo y Máxima dejarán de ser los Príncipes de Orange y serán los primeros reyes del XXI. Ambos son los pioneros de una generación en la que también se encuentran Victoria de Suecia, Haakon de Noruega, Federico de Dinamarca, Felipe de Bélgica, Carlos de Inglaterra, Felipe de España y Guillermo de Luxemburgo.
Y son los primeros por la costumbre de los Monarcas Holandeses de abdicar cuando consideran que su labor ya ha concluido, y que es el momento de ceder a una nueva generación más preparada y con la edad adecuada para ostentar la Jefatura del Estado y todo lo que esto representa.
Guillermo y Máxima se casaron en 2002
El Heredero, Willem Alexander Claus George Ferdinand, nació el 27 de abril de 1967, y por tanto será rey de los holandeses tres días después de cumplir 46 años. Guillermo es el primogénito de la Reina Beatriz, que tras la abdicación volverá a ser Princesa, y del Príncipe Claus, fallecido en 2002. Tiene dos hermanos, Constantino, que apoyará institucionalmente al futuro Rey, y Friso, que renunció a sus derechos sucesorios por su matrimonio y que permanece en coma desde febrero de 2012.
El todavía Príncipe Guillermo se casó con Máxima Zorreguieta el 2 de febrero de 2002. La pareja se conoció en mayo de 1999 en Sevilla, donde el Príncipe se quedó prendado de la argentina. Poco después de separarse, Guillermo voló a Nueva York para volver a ver a Máxima, ciudad en la que residía y donde trabajaba en el sector económico, así comenzó su noviazgo El 30 de marzo de 2001, Máxima abandonó su labor con motivo de su compromiso con el Heredero, conviertiéndose en ciudadana holandesa el 17 de mayo de ese mismo año.
El 3 de julio el Parlamento consintió el matrimonio, requisito imprescindible para que este pudiera celebrarse. Sin embargo no todo fueron buenas noticias para Guillermo y Máxima, pues se vetó la presencia del padre de la futura Princesa de Orange, Jorge Zorreguieta, que había sido un alto cargo del ministerio de Agricultura durante la dictadura militar de Jorge Videla, por lo que tuvo que ver la boda desde un hotel de Londres junto a su esposa, Carmen Cerruti, que se solidarizó con su marido. Máxima quiso recordar a sus padres, y a todo su país con el tango 'Adiós Nonino ' que sonó durante el enlace y que arrancó las lágrimas de la novia.
Las tres hijas de Guillermo y Máxima de Holanda
Comenzaba así una unión que pronto fue prolífica. Los Príncipes de Orange se convirtieron en padres de la Princesa Catharina-Amalia el 7 de diciembre de 2003; el 26 de junio de 2005 nació la Princesa Alexia, mientras que la Princesa Ariane vino al mundo en La Haya el 10 de abril de 2007, siendo la tercera y última de los hijos de Guillermo y Máxima, que aseguraban así la sucesión.
Desde el 30 de abril, Amalia pasará a ser la Princesa de Orange, y sus padres, los Reyes de Holanda, un país que despedirá a Beatriz, una reina muy querida y respetada que consiguió superar todos los escándalos que afectaron a la Monarquía. El listón queda alto, pero no supone un problema para un Príncipe educado para reinar, y una economista argentina que consiguió ganarse al pueblo holandés en tiempo récord gracias a su simpatía, su naturalidad y su sencillez.