Padre e hijo
El 4 de enero de 2022 la Casa Gran Ducal anunció que el Gran Duque de Luxemburgo había dado positivo. Afortunadamente tenía síntomas leves, por lo que seguiría adelante con sus funciones, eso sí, cumpliendo con la obligatoria cuarentena. Justo una semana más tarde se confirmó que el Gran Duque Heredero también ha dado positivo.
"Después de una autoprueba que resultó positiva, Su Alteza Real el Príncipe Heredero entró en autoaislamiento. Una prueba PCR realizada posteriormente confirmó el resultado positivo y Su Alteza Real permanece en aislamiento, de conformidad con lo dispuesto en la reforma de la ley de 17 de julio de 2020 sobre medidas para combatir la pandemia de COVID-19", señaló la Casa Gran Ducal.
"Su Alteza Real no tiene síntomas y está bien. Reanudará sus funciones al final del período de aislamiento", añadió el comunicado. De este modo, Guillermo de Luxemburgo, que como su padre está completamente vacunado, ha pasado la enfermedad de forma asintomática, mientras que Enrique de Luxemburgo tan solo tiene síntomas leves.