La última vez que se había visto al Príncipe Guillermo, Kate Middleton, el Príncipe Harry y Meghan Markle juntos fue en marzo de 2020, en el servicio religioso por el Día de la Commonwealth, el último evento de los Duques de Sussex como miembros de la Corona británica. Desde entonces es bien sabido que tanto la decisión como la distancia puesta por estos últimos fue motivo de enfados, desencuentros e incluso distanciamiento entre los hermanos. Pero ha sido la muerte de la Reina Isabel II que asolado a la familia la razón para firmar la paz -o una tregua- entre ellos y mostrarse de nuevo los dos matrimonios unidos ante las adversidades.
Ocurría el sábado 10 de septiembre, dos días después del fallecimiento de la Reina y el mismo día en el que Carlos III era proclamado oficialmente como nuevo Rey. En la agenda de la familia real estaba previsto que los ahora Príncipes de Gales saliesen del Castillo de Windsor para ver la ofrendas florales y regalos depositados allí el homenaje a su abuela. En cambio, lo que nadie se esperaba era que lo hicieran en compañía del Príncipe Harry y Meghan Markle.
Los Príncipes de Gales y los Duques de Sussex junto a las ofrendas florales en Windsor por la muerte de la Reina Isabel IINada más bajarse de los coches que les llevaron hasta casi la salida antes de hacer el último recorrido a pie, las dos parejas mostraron un comportamiento diferente, pero unidos por el luto que vestían y sentían. Mientras que los Duques de Sussex se permitieron mostrarse más cercanos, cogidos de la mano y haciéndose muestras de cariño; los Príncipe de Gales eran más protocolarios, marcando algo de distancia entre ellos.
Un imagen de unión que hacía 2 años y medio que no sucedía
Lo primero que hicieron los cuatro fue observar todas las ofrendas florales y los diferentes regalos depositados ante el Castillo de Windsor en muestra de cariño y respeto a la Reina Isabel II tras su fallecimiento. Tras esto, dieron un paseo a su alrededor de cerca de 40 minutos donde recibieron personalmente el cariño de los cientos de personas allí presentes. Además de saludar, los cuatro no dudaron en acercarse para hablar con ellos, recoger algunos presentes, darles la mano e, incluso en el caso de Meghan Markle, abrazarlos.
Los Príncipes de Gales y los Duques de Sussex dándose un baño de masas ante el castillo de WindsorTal y como apuntan medios ingleses, habría sido el Príncipe Guillermo el que tomó la iniciativa de invitar a su hermano y su cuñada a unirse a ellos en un momento tan simbólico como este. Una rama de olivo entre los Príncipes en un momento de gran relevancia para la familia al suponer un importante cambio para ellos. Una unión que, por cierto, habían mostrando minutos antes otros miembros de la familia, ellos a las puertas del castillo de Balmoral en el que descansa todavía el cuerpo de la Reina Isabel II hasta este domingo 11 de septiembre.
