El Príncipe Guillermo y la Duquesa Catalina han abandonado los Territorios del Norte de Canadá para encaminarse a Alberta, donde han visitado Slave Lake y una zona afectada por recientes incendios.
Los Duques de Cambridge se entrevistan con los damnificados de Slave Lake
Guillermo y Catalina mostraron su cara más solidaria, ya que además de comprobar la devastación ocurrida tanto en los bosques como en las zonas de la ciudad a las que llegaron las llamas, los Duques se entrevistaron con los damnificados, que según informa 'The Mirror' muchos de ellos siguen sin poder regresar a sus casas.
La real pareja paseó durante más de una hora entre coches calcinados, casas destruidas y árboles carbonizados, y se reunieron con la Policía Montada y con los bomberos de esta localidad en la que 7.000 personas tuvieron que ser evacuadas.
El Príncipe Guillermo recibe como regalo un cerdito rosa de peluche
Posteriormente los Duques de Cambridge se dieron un baño de masas con los ciudadanos de Slave Lake que quisieron conocer y saludar a quien algún día será Rey y a su consorte.
La Duquesa volvió a brillar con luz propia vestida de forma elegante pero informal con unos pantalones pitillo y una americana azul marino y cautivó a niños y a mayores repartiendo saludos y sonrisas a la población. Por su parte, el Príncipe Guillermo no se quedó atrás y también sintió el calor del pueblo, quien le obsequió con un cerdito rosa de peluche que a buen seguro volverá con los Duques a Londres.