La hija mayor del Príncipe Haakon ha desafiado las convenciones estilísticas en la celebración de las Bodas de Oro de los Reyes de Noruega.
La Princesa Ingrid Alexandra de Noruega es la perfecta futura heredera. Viendo la poca disposición de su abuelo, el Rey Harald V, a abdicar, todavía faltan años para convertirse en la heredera al Trono, pero ya se está preparando para cuando le toque asumir tamaña responsabilidad. A sus 14 años, ya sabe lo que es participar en actos oficiales, y no solo aquellos eventos familiares en los que es necesaria su presencia, como cumpleaños. Sin ir más lejos, inauguró un parque de esculturas en Oslo con su nombre. Además, amadrinó un barco de los servicios de rescate marítimos de Noruega. Por si fuera poco, participó en la recepción que la Familia Real Noruega a los Duques de Cambridge cuando visitaron el país escandinavo a principios de 2018.
Ya cuando inauguró el parque de esculturas apareció con unas zapatillas blancas, un look un tanto extraño para una royal, por muy joven quen sea, y ahora lo ha vuelto a hacer. Con motivo de la celebración de las Bodas de Oro de los Reyes Harald y Sonia de Noruega, se enfundó un vestido mini blanco con detalles en negro, y como calzado, unas zapatillas blancas. Nada que ver con sus primas
Ese gesto de 'rebeldía' al calzarse unas Superga contrasta con los atuendos de sus primas, Maud Angelica, Leah Isadora y Emma Tallulah, que llevaban bailarinas, más apropiadas para un acto de semejantes características.
Lo cierto es que aunque resulte poco apropiado para una adolescente que está llamada a ser Reina de Noruega, el look era bastante favorecedor y rompedor para una Familia Real acostumbrada a romper moldes. No hay más que ver el matrimonio de sus padres y el de sus abuelos.