También se ha vuelto a ver a la Reina luciendo tacones pese al inconveniente que provocó la anécdota de la cena de gala, al tener que estar sentada en el besamanos por la dolencia que sufre en los pies, el neuroma de morton. En cuanto al estilismo de la Reina Máxima de Holanda, esta vez ha rescatado un vestido de manga corta bicolor de Jan Taminiau, mientras que Amalia de Holanda ha escogido un vestido midi satinado en color verde esmeralda.
Un bonito gesto pocas veces visto
Los Reyes de ambas Casas Reales han estado muy implicados en la visita, charlando con los artistas que se encontraban en el Museo Straat, entre los que estaba Okuda, reconocido artista español que se ha hecho una foto con la Reina Letizia. Además, han participado dejando su firma en uno de los lienzos. Los discursos de cierre de la Visita de Estado también han sido muy destacados, pues se han mostrado muy agradecidos los unos con los otros:
"La Reina y yo hemos asistido en el pasado a muchas espléndidas representaciones culturales durante visitas de Estado entrantes. Pero nunca nos habían invitado a clausurar una visita de Estado en un lugar como éste. Rudo, vanguardista y totalmente original. Nos encanta. Han abierto nuevos caminos. Y ya nos estamos preguntando: ¿cómo podremos superar esto? ¡Sin duda han puesto el listón muy alto!", decía el Rey Guillermo antes de ofrecer un brindis y decir en español "hasta la próxima".
Sin embargo, ha habido un gesto que ha acaparado todas las miradas pues suele darse en contadas ocasiones. El Rey Felipe parece haber estado muy pendiente de la Reina Letizia durante este viaje, quizás por esa dolencia que padece, y en esta visita al museo han protagonizado un momento que no ha pasado desapercibido. El monarca ha posado colocando la mano en la cintura de su mujer, algo apenas visto y que denota que están unidos ante todo lo que tengan por delante. Concluye así una exitosa Visita de Estado a los Países Bajos.