Rocasolano, abogado de profesión, cuenta en su libro que la Princesa de Asturias se sometió a un aborto en la clínica Dator en 2002, antes de casarse con el Príncipe Felipe. Esto ha provocado que La Gaceta, un periódico de marcada tendencia derechista y conservador, publique un editorial en el que la Princesa no sale bien parada.
El silencio, la peor opción
En el texto se señala que al ser Doña Letizia la futura Reina de España, "una acusación como la que se contiene en ese libro va mucho más allá de un execrable cotilleo sobre la vida privada de una persona común". Asimismo, recuerda que en 2002 la legislación sobre el aborto limitaba esta práctica a tres supuestos. riesgo grave para la salud física o psíquica de la madre, violación y malformaciones o taras físicas o psíquicas en el feto.
La Gaceta continúa señalando que Doña Letizia tendría que haberse acogido a estos supuestos, pues de lo contrario " habría cometido un delito contemplado en el Código Penal ". Por ello, este periódico apunta en este artículo de opinión que debe declarar en público cuál fue el supuesto elegido para demostrar que no incurrió en ninguna ilegalidad.
Por otro lado, este medio conservador recuerda que todo puede ser una mentira de David Rocasolano, por lo que si esto fuera así, la Princesa debería denunciarle por calumnias. " Si no abortó, debe decirlo y llevar a su primo ante los tribunales. Si lo hizo, debe explicar en qué condiciones y demostrar que no cometió delito alguno. Lo peor que podría hacer es guardar silencio ", finaliza este editorial.