Juliane Snekkestad ha usado su cuenta de Instagram para contar que ella fue sometida a violencia física y psicológica por parte de su expareja.
La polémica detención de Marius Borg continúa en el foco público y según va avanzando la investigación, se van conociendo nuevos datos. Después de que el hijo de la Princesa Mette-Marit fuera detenido por presunta agresión a una joven de 20 años, que tuvo que ser atendida en el hospital por una conmoción cerebral, se han desvelado nuevos detalles de lo que ocurrió y del punto en el que se encuentra la investigación.
Ha sido el medio Se og Hør el encargado de publicar unas imágenes de cómo quedó el apartamento de Frogner, en Oslo, después de que Marius Borg atacara presuntamente a la joven. Unas imágenes impactantes en las que lo que más llama la atención es el cuchillo que encontró la policía clavado en la pared de la habitación de la víctima. Ahora, los científicos forenses están buscando huellas dactilares en el cuchillo y evidencias de ADN para sacar más conclusiones de lo ocurrido.Aunque, eso no es todo, ya que en las imágenes se puede ver el interior del apartamento totalmente destrozado. En el suelo se encontró una lámpara de araña rota en el suelo, con los fragmentos de vidrio y prismas brillantes esparcidos por el dormitorio. Además, se aprecian otros objetos rotos en el suelo, como piezas de un Iphone, un secador de pelo o una maquinilla de afeitar.
Su exnovia le acusa de violencia
Tras la detención de Marius Borg, son muchos los que se preguntan si ya había ocurrido anteriormente con otras mujeres y su exnovia, Juliane Snekkestad, ha querido hablar al respecto. La chica, que empezó a salir con Marius Borg a principios de 2018, estuvo viviendo con él en Londres y más tarde, en Noruega, donde se compraron una casa juntos y se mudaron a Tønsberg. Allí estuvieron hasta 2022, cuando la pareja decidió separarse. Ahora, Juliane Snekkestad ha usado las redes sociales para contar lo que vivió.
"Los últimos días han sido extraños y dolorosos. Durante la semana pasada, recibí un montón de llamadas telefónicas, mensajes y preguntas sobre los cargos de mi ex. En primer lugar, me gustaría enviar mis mejores pensamientos a la víctima del caso", comenzó escribiendo la modelo a través de un comunicado publicado en su cuenta de Instagram. Juliane Snekkestad contó que su familia y amigos ya estaban al tanto de lo que ocurrió, pero que nunca lo había dicho públicamente y que había llegado el momento de romper su silencio."Anteriormente he sido objeto de violencia mental y física por parte de la persona en cuestión. La violencia psicológica fue lo más brutal para mí", confesó la modelo en el comunicado, asegurando que no compartía este testimonio por "lástima" o para poner el foco sobre ella, sino para darle la importancia necesaria a lo ocurrido y aclarar que la violencia de la que se acusa a Marius Borg en estos momentos ya había ocurrido anteriormente. "Esto ya ha sucedido antes. Y esto hay que pararlo ya. Que más mujeres estén expuestas a esto ya no es posible y siento la responsabilidad de compartirlo", añadió.
"No creo que las personas que exponen a otros a un trauma como este entiendan cómo ayuda a moldear a una persona. Incluso después de años de ayuda profesional y apoyo de mi increíble familia, prometido y amigos, nunca vuelves a ser la misma persona...", continuó diciendo Juliane Snekkestad. "Espero que la víctima del caso reciba el apoyo y la ayuda que necesita para superar este momento. Es importante recordar en todo esto que todos somos humanos y ser humano es a veces increíblemente difícil. Cuídense los unos a los otros y sean amables los unos con los otros", concluyó con un comunicado en el que rompió su silencio y contó lo que vivió durante su relación con el hijo de la Princesa Mette-Marit.