El fuerte compromiso que tiene el Príncipe Guillermo contra el racismo y el abuso le ha hecho unirse al apagón virtual promovido por los equipos de fútbol de la Premiere League contra los insultos y ataques que sufren los profesionales de este deporte, y por eso no se sabía si con motivo del cumpleaños de su hija él y su mujer iban a compartir una foto de la niña, pero por suerte sí la han compartido.
La Princesa Carlota en su sexto cumpleaños"Como Presidente de la FA me uno a toda la comunidad futbolística en el boicot de las redes sociales este fin de semana", anunciaba de manera oficial desde la cuenta del Palacio de Kensington. Pero lejos de este compromiso, han cumplido con la tradición con una inédita fotografía que a pesar de que no haya llegado a través de su cuenta oficial, se ha compartido en la cuenta de la Familia Real.
La imagen de la Princesa Carlota, en la que aparece con un look muy primaveral y sonriente, venía con el siguiente mensaje: "El Duque y la Duquesa de Cambridge están muy felices de compartir una nueva fotografía de la Princesa Carlota por su sexto cumpleaños. La imagen fue tomada por la duquesa este fin de semana en Norfolk". Una vez más ha sido Kate Middleton de una imagen inédita de sus hijos, y es que la Duquesa de Cambridge tiene pasión por la fotografía.
La Princesa Carlota llamando a una puerta para entregar comida durante el confinamientoSe nota que la niña está creciendo a pasos agigantados y que lejos quedan ya las coletas o trenzas, porque ha posado con la melena al viento. Este año las cosas han cambiado mucho, puesto que el año anterior Carlota celebró su cumpleaños en pleno confinamiento, y la foto de rigor estuvo marcada por estas circunstancias, ya que la pequeña aparecía ejerciendo labores de voluntariado en plena crisis sanitaria.
Su lado más solidario
En esa ocasión apareció también con una gran sonrisa, con varias bolsas con alimentos en cada mano, para ayudar en el reparto de comida a las personas mayores que se encontraban confinadas cerca de Sandringham, en las inmediaciones de su residencia de Anmer Hall, donde estaban pasando la cuarentena.
