En un momento en el que la Familia Real Británica está en el foco mediático, sobre todo por Kate Middleton, hay una nueva noticia que ha acaparado la atención. Después de que la Princesa de Gales haya pasado por una intervención quirúrgica abdominal, las teorías de conspiración que se crearon sobre su estado y la fotografía por el Día de la Madre, que fue retocada, no se habla de otra cosa. En cambio, esta vez no se habla de Kate Middleton, sino de Meghan Markle, ya que lleva un tiempo metida en una batalla judicial con su hermana.
Una batalla que comenzó a raíz de la demanda de Samantha Markle a su hermana por difamación por la que le exigía 70.000€. Ahora, el caso ha llegado a su fin y ha sido el medio 'Daily Mail' el encargado de informar sobre la nueva decisión de la jueza al cargo del caso, Charlene Edwards Honey. La demanda ha sido desestimado de forma permanente, por lo que Samantha Markle no podrá volver a demandar a su hermana por estos hechos.
"El tribunal determina que la declaración de la acusada no es objetivamente verificable ni está sujeta a pruebas empíricas. La demandante no puede refutar plausiblemente la opinión de la demandada sobre su propia infancia", indicó la jueza sobre la demanda de Samantha Markle. Tras esto, ya no podrá presentar cargos contra su hermana por estos motivos, ya que el caso ha sido desestimado de manera permanente.
El inicio de la batalla
Tras casi tres años de problemas legales entre las hermanas, el caso ha llegado a su fin. Una batalla judicial que comenzó entre Meghan Markle y Samantha Markle después de que los Duques de Sussex concedieran una entrevista a Oprah Winfrey y la posterior emisión en Netflix de un documental sobre su vida. En la comentada entrevista, Meghan Markle habló de la Familia Real Británica, pero también de la suya, algo que hizo sentir " humillación, vergüenza y odio a escala mundial " a su hermana, según ella misma en la declaración.
A finales de 2023, la hermana de Meghan Markle volvió a interponer la demanda por difamación y en ese momento sí fue admitida. En cambio, esta vez no ha sido aceptada, de hecho ha sido desestimada definitivamente. Por ello, Meghan Markle no tendrá que asistir a un juicio, ya que el caso se da por cerrado y por lo tanto, la batalla judicial entre hermanas ha llegado a su fin.