El lunes 22 de octubre tuvo lugar el acto de entronización de Naruhito como Emperador. Para la ocasión, el Rey vistió frac, mientras la Reina apostó por un diseño colorido con estampado de flores en fondo verde, el mismo color del cinturón que realza su figura. A este diseño de Matilde Cano añadió como complementos una cartera de mano de Carolina Herrera y una diadema de terciopelo de Nana Golmar.
Royals de todo el mundo en la entronización
La ceremonia, llamada Sokuirei Seiden no Gi, ha tenido lugar en el Salón de Estado del Palacio Imperial de Tokio. Allí, el Emperador ofreció un discurso llamando a la paz y a la prosperidad: "Juro actuar según la Constitución y cumplir mi responsabilidad como símbolo del Estado y de la unidad. Espero que Japón se desarrolle y contribuya a la amistad y paz en la comunidad internacional, y al bienestar y prosperidad de la humanidad a través de la sabiduría y constantes esfuerzos de las personas", ha manifestado.
Los dignatarios extranjeros no fueron testigos directos de lo que ocurría debido al tamaño de la sala en la que estaban el Emperador, la Emperatriz Masako y de otros miembros de la Familia Imperial, sino que siguieron la ceremonia desde otro lugar. Naruhito se ha colocado en el trono de ocho toneladas de peso y seis metros y medio de altura, el Takamimura, mientras que la Emperatriz se ha colocado en un trono cercano, pero inferior. Después de la ceremonia no ha habido paseo en coche por las calles de Tokio debido al tifón Hagibis, por lo que se ha pospuesto al 10 de noviembre.
La era Reiwa, que comenzó el 1 de mayo de 2019 tras la subida al Trono de Naruhito de Japón, ha llegado para traer nuevos aires de modernidad al país del sol naciente. El siguiente paso necesario sería no impedir que las mujeres llegaran al Trono del Crisantemo y que no perdieran su posición al casarse con plebeyos. Mientras llega ese momento, si llega, el Heredero es el hermano del Emperador, el Príncipe Aishino, y después su tercer hijo, el Príncipe Hisahito, que se prepara para asumir algún día el papel de Emperador si una ley igualitaria no lo remedia.