Seis días después de que la fumata blanca anunciara que el Cardenal Jorge Mario Bergoglio era el elegido para tomar el relevo de Benedicto XVI al frente de la Iglesia católica, se ha celebrado en la Plaza de San Pedro la Misa de Inicio del Pontificado.
Un acto solemne que ha comenzado cuando el Papa Francisco I ha llegado a la sacristía ubicada al lado de la estatua de La Piedad de Miguel Ángel después de recorrer en un jeep descubierto -en lugar del Papamóvil- los diferentes corredores de la Plaza de San Pedro saludando con la mano y bendiciendo a los miles de fieles que se han dado cita; incluso en algún momento ha levantado los pulgares para mostrar su alegría.
A la misa de entronización del nuevo Papa, que ha dado comienzo a las 09:30 horas, han acudido hasta 132 delegaciones oficiales. Por parte de España han acudido los Príncipes Felipe y Letizia junto al Presidente del Gobierno Mariano Rajoy, el Ministro de Asuntos Exteriores José Manuel García Margallo, el de Interior Jorge Fernández Díaz y el de Justicia Alberto Ruiz Gallardón.
Para la ocasión, y siguiendo el estricto protocolo, doña Letizia ha optado por un traje de chaqueta de color negro con el corte de la falda y mantilla de encaje sin peineta; un look muy similar, o incluso el mismo, al lucido en mayo de 2011 para acudir a la Misa de Beatificación de Juan Pablo II.
A su llegada a la Plaza de San Pedro los Príncipes de Asturias han saludo muy efusivamente a los Príncipes Guillermo y Máxima de Holanda, y éstos también han intercambiado algunas palabras con la Presidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner.
Los Príncipes de Asturias encabezan la delegación española
Junto a los Príncipes también han estado en la Misa de Inauguración otros miembros de la realeza como los Príncipes Alberto y Charlene de Mónaco, así como los Reyes Alberto y Paola de Bélgica -que ha acudido vestida de blanco puesto que ella sí tiene 'ese poder' por su condición de Reina-.
Todo ellos han sido testigos del inicio del Pontificado de Francisco I, que ha querido dedicar la Homilía a Joseph Ratzinger en este 19 de marzo, Día de San José. " Queridos hermanos y hermanas, doy gracias al señor por poder celebrar esta santa misa en la solemnidad de San josé, esposo de la Virgen ", ha dicho como dedicatoria a Benedicto XVI.