La pandemia ha separado a las familias en mayor o menor medida. Para la Familia Real Británica ha supuesto una etapa de enorme distanciamiento tan solo atenuado durante algunos días de vacaciones en Balmoral, donde la Reina Isabel y el Duque de Edimburgo pasaron unas semanas y recibieron a algunos de sus hijos, nietos y bisnietos, aunque siempre con mucha precaución.
Por eso, y teniendo en cuenta que la Reina Isabel ha cancelado el tradicional almuerzo prenavideño en Buckingham Palace y la Navidad familiar en Sandringham, es lógico que estuviera radiante al recibir a varios de los miembros de la Familia Real Británica en Windsor Castle. Fue así el primer reencuentro de tantos integrantes de la dinastía desde el comienzo de la pandemia, al menos públicamente.
El motivo fue un encuentro con voluntarios y trabajadores esenciales de Berkshire a los que la Familia Real Británica quiso agradecer su labor durante la pandemia. A ellos se les dispensó un encuentro en una carpa colocada en los terrenos de Windsor Castle en la que por supuesto todos llevaron mascarilla. Además, se había producido un momento muy emotivo cuando la Reina Isabel apareció en la puerta de su residencia favorita para recibir a sus familiares.
La Monarca estaba feliz y sonriente. Lució para la ocasión un colorido vestido rojo, perfecto para la ocasión prenavideña. Recibió encantada al Príncipe Carlos y Camilla Parker, así como a los Duques de Cambridge, a los Condes de Wessex y a la Princesa Ana. Se le vio hablando con el Príncipe de Gales y la Duquesa de Cornualles por un lado, con el Príncipe Guillermo y Kate Middleton por otro, así como con el Príncipe Eduardo y Sophie Rhys-Jones. Eso sí, respetaron la distancia entre sí y con la Reina.
Reencuentro de royal workers
Los miembros de la Casa Real Británica escucharon una serie de villancicos interpretados por la orquesta real The Salvation Army Band que pusieron una nota musical a este encuentro a modo de celebración prenavideña con la que además los Duques de Cambridge pusieron fin a su Royal Train Tour, un viaje de dos días por distintos puntos de Inglaterra, Escocia y Gales con el que homenajearon el trabajo de personas y organizaciones que han ayudado a sobrellevar unos meses tan duros debido a la pandemia.
En el encuentro se echó de menos al Duque de Edimburgo, que no salió a pesar de que se encuentra en el Castillo de Windsor. Se entiende que solo aparecieron los miembros trabajadores de la Casa Real Británica de la línea principal. Teniendo en cuenta que el Duque de Edimburgo se retiró de los actos oficiales en 2017 tras siete décadas de servicio a la Corona, no tenía por qué aparecer en los eventos oficiales.
Así, la Reina Isabel se encontró con los miembros principales de la Familia Real Británica, aquellos que seguirán sirviendo a la Corona cuando ella ya no esté. A pesar de los planes del Príncipe Carlos de una Casa Real reducida, el futuro de la Monarquía pasa por el apoyo no solo de Camilla Parker y de los Duques de Cambridge a Carlos como Rey, sino también de los Condes de Wessex y la Princesa Ana, grandes activos para la Corona británica.