El aislamiento que sufre Iñaki Urdangarín, apartado de la Casa Real desde que saltó su escándalo de corrupción, se ha hecho patente esta tarde en el entierro de su padre, Juan Mari Urdangarín, fallecido el pasado jueves.
Aunque la Reina Sofía y la infanta Elena viajaron hasta Vitoria para darle el pésame a la familia, no han querido ser fotografiadas junto a Iñaki Urdangarín por lo que ninguna ha asistido al funeral. Las dos estuvieron cerca de tres horas en el velatorio íntimo y después tomaron un vuelo de regreso a Madrid. Tampoco lo han hecho el Rey Juan Carlos, ni los Príncipes Felipe y Letizia.
Sí han acudido los cuatro hijos de la infanta y Urdangarín : Juan, Pablo, Miguel e Irene. Es la primera vez en diez meses que los cuatro pequeños visitan España. Desde que saltó el Caso Urdangarín la infanta los ha mantenido alejados de la opinión pública. Cristina y sus hijos aterrizaron esta mañana en Madrid en un vuelo procedente de Washington para después desplazarse hasta Vitoria.
Iñaki Urdangarín, muy unido a su padre
La muerte de su padre es un duro golpe para Iñaki Urdangarín, ya que estaba muy unido a él. Juan Mari fue el principal apoyo de Iñaki en su carrera deportiva, y le asesoró en su matrimonio con la infanta Cristina. Durante estos últimos meses era también una evasión para el Duque de Palma mientras afrontaba sus problemas judiciales ya que, debido a su enfermedad, no fue informado de los problemas de su hijo con la justicia.
Consciente del empeoramiento de la salud de su padre, Urdangarín le visitaba frecuentemente, aunque siempre con la máxima discreción, de ahí que ninguno de sus viajes trascendiera a los medios. El pasado martes se traslado a Vitoria al conocer el empeoramiento y desde entonces no se ha separado de su madre, Claire Liebaert.
Juan María Urdangarín fue incinerado el pasado viernes y este sábado a las 20 horas ha tenido lugar el funeral en la Basílica San Prudencio de Armentia. Urdangarín ha desfilado junto a su esposa e hijos visiblemente afectado, con el rostro cansado y la extrema delgadez a la que nos tiene acostumbrados desde que se hizo público el caso Urdangarín.
Al último adiós ha acudido también Mario Pascual Vives, abogado y portavoz de Urdangarín en su proceso judicial, así como varios miembros del PNV, partido al que Juan Mari estaba vinculado durante su trabajo como presidente de Caja Vital.