La Familia Real Española no disfrutará de los grandes fastos con los que se va a celebrar la boda entre el Príncipe Alberto II de Mónaco y Charlene Wittstock, ya que según Europa Press, finalmente no está previsto que acuda ningún miembro de la Casa Real.
Al ser este el enlace de un Jefe de Estado, la invitación ha sido enviada a nombre de Don Juan Carlos, quien no se desplazará a Monte-Carlo por dos motivos; el primero de ellos es que Su Majestad no tiene por costumbre acudir a bodas, salvo a las que tienen lugar en el seno de su familia, y el segundo es que aún se encuentra convaleciente de la operación de rodilla a la que fue sometido en la Clínica San José de Madrid el pasado 3 de junio.
Por ello, ni el Príncipe Felipe, ni Doña Letizia, ni las Infantas Elena y Cristina están invitados al enlace, mientras que la Reina Sofía no tiene previsto acudir a la boda que convertirá a la nadadora sudafricana en Princesa de Mónaco el próximo sábado 2 de julio.
Luis Alfonso de Borbón sí está invitado a la boda
Así, tras la boda de los Duques de Cambridge donde la Reina Sofía y los Príncipes de Asturias ejercieron de representantes de la Casa Real Española, en la boda monegasca podría no contar con ningún miembro de la Familia Real. Sin embargo, sí que podría asistir la Infanta Pilar debido a la relación que le une con el Soberano Monegasco al ser los dos integrantes del Comité Olímpico Internacional.
Por otro parte, sí que está confirmada la presencia del Presidente de la República Francesa, Nicolas Sarkozy, del diseñador Karl Lagerfeld, de Ines de la Fressange, de Jacques Rogge, de José Manuel Durao Barroso, del Rey Alberto II de Bélgica, de la Familia Real Sueca al completo, de la Presidenta de la República de Irlanda, de Luis Alfonso de Borbón, del modisto Giorgio Armani y de la actriz Demi Moore, entre otros ilustres invitados.