Los Reyes han llegado han presidido los actos conmemorativos del Día de la Hispanidad acompañados de los Príncipe Felipe y Letizia, los Duques de Palma, Cristina e Iñaki Urdangarín, y la Duquesa de Lugo. Ésta será la última parada militar celebrada en Madrid con motivo de la Fiesta Nacional bajo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
El Rey Juan Carlos se ha ayudado de una muleta
Precisamente en ese punto de partida, el templo de los seguidores del Atlético de Madrid, ha estado situado el Palco Presidencial, en el que, como novedad, se han instalado sillas. Y es que el Rey Juan Carlos ha tenido que acudir al acto ayudándose de una muleta después de las dos operaciones (una de rodilla derecha y otras en el talón de Aquiles del pie izquierdo) a las que se ha sometido recientemente.
Por ese motivo, el Monarca, que ha llegado hasta la Plaza de Neptuno, siguiendo la tradición, subido en un Rolls-Royce junto a la Reina Sofía, ha pasado revista a las unidades de honores de la Guardia Real a bordo de un vehículo militar.
Sillas en el Palco Presidencial
Ya en el Palco Presidencial, al que don Juan Carlos ha llegado rodeado de su familia y el Presidente del Gobierno y ayudado por su bastón, había instaladas unas sillas para que el Jefe de Estado pudiera descansar y estar más cómodo durante el desfile. Otro elemento nuevo: nunca antes había habido sillas en la tribuna de autoridades.
Tras el desfile, la Familia Real al completo se ha desplazado hasta el Palacio Real, donde se producirá la tradicional recepción. En esta ocasión también tiene una nota diferente respecto a año anteriores. El besamanos se ha trasladado del Salón del Trono a la Saleta Gasparini, una habitación más pequeña, y del millar de invitados habituales se ha limitado a los representantes de los poderes del Estado.