Las Visitas de Estado suponen los desplazamientos oficiales de mayor rango. Son aquellas en las que un Jefe de Estado invita a otro y sirven para profundizar en las relaciones bilaterales, mejorando en ciertos asuntos, manteniendo los vínculos en otros y profundizando en la cooperación. Además, siempre tienen un aliciente cuando el que va o el que recibe es un Rey o una Reina de Europa, como ha ocurrido en la Visita de Estado que el Presidente de India ha realizado a Países Bajos entre el 5 y el 6 de abril de 2022.
En 2019, Guillermo Alejandro y Máxima de Holanda viajaron a La India por invitación del Presidente Ram Nath Kovind. Quedó pendiente desde entonces que el mandatario indio realizara una Visita de Estado a Holanda, lo que se tuvo que posponer debido a la pandemia hasta que la situación sanitaria mejoró lo bastante como para que el viaje pudiera realizarse con seguridad. El momento llegó en abril de 2022, celebrando además el 75 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países.
Después de una jornada, la del 4 de abril de 2022, en la que el Presidente de La India y su esposa, Savita Kovind, visitaron Keukenhof para bautizar al tulipán Maitri en presencia del Ministro de Exteriores, Wopke Hoekstr, para simbolizar el 75 aniversario del establecimiento de relaciones, el día 5 llegó el momento de la recepción oficial. Los Reyes de Países Bajos dieron la bienvenida a sus homólogos indios en la plaza Dam de Amsterdam, tras lo que se produjo una recepción en el Palacio Real situado en este mismo lugar y una ofrenda floral al Monumento Nacional que se asienta en Dam.
La ceremonia de bienvenida estuvo marcada por la presencia de Nadia Rashid, que se colocó allí con un cartel en el que denunció que su hija Insiya fue secuestrada en Ámsterdam por orden de su padre en 2016 y llevada a La India, país de sus progenitores. Desde entonces, Rashid lucha para poder ver a su hija, y quiso que los Reyes de Holanda y el Presidente de La India y su esposa conocieran su situación. Al verla, Guillermo Alejandro y Máxima se pasaron y escucharon su testimonio: " Déjame decirte que como madre no puedo imaginar por lo que estás pasando ", le dijo la Reina de Holanda, que se comprometió a que su caso se conozca y se escuche para que logre volver a estar con su hija.
La tiara de aguamarinas
Por la noche llegó el gran momento, el de mayor esplendor en toda Visita de Estado: la cena de Estado. Las estancias del Palacio Real de Amsterdam volvieron a abrirse completamente engalanadas para la celebración de un banquete de Estado que los Reyes Guillermo Alejandro y Máxima de Holanda ofrecieron en honor a Ram Nath y Savita Kovind. La Reina Máxima derrochó sonrisas y espontaneidad, como suele ser habitual en ella. No dudó en utilizar el namasté para recibir a los invitados en el besamanos previo al banquete.
Pero no solo eso. No hay duda de que Máxima de Holanda estuvo no solo simpática, sino también resplandeciente, como siempre lo está en las grandes ocasiones. Eligió un vestido de Luisa Beccaria que ya se había puesto en el Prinsjesdag 2018, un traje en georgette de seda que ha sacado del armario. Y por supuesto las tiaras. Este uno complemento es la joya de las joyas para las mujeres de las Casas Reales, y no suelen faltar en las Cenas de Estado. La Reina de Países Bajos sacó del joyero real la tiara de aguamarinas, una pieza que Guillermina y Enrique de Holanda regalaron a su hija Juliana, madre de Beatriz de Holanda y abuela del Rey Guillermo Alejandro, con ocasión de su 18 cumpleaños.