Cuando se acordó el Sussexit se firmó una cláusula por la que se establecía una revisión a los 12 meses. Es decir, hasta el 31 de marzo de 2021 el Príncipe Harry y Meghan Markle podrían pensárselo mejor y regresar a la Casa Real Británica para servir a la Corona a tiempo completo. Después de todo lo que han pasado y lo que han vivido unos y otros, es poco probable que eso ocurra. Además, teniendo en cuenta la mansión que se han comprado, incluso se estarán arrepintiendo de haber querido quedarse con Frogmore Cottage.
Tras una estancia de semanas en Vancouver, los Duques de Sussex y su hijo Archie se trasladaron a Los Angeles. Se establecieron en una mansión de Beverly Hills que su amigo Tyler Perry les prestó durante el tiempo que necesitaran. Ese tiempo finalizó en julio de 2020 cuando se instalaron en otra propiedad a unos 150 kilómetros al noroeste de Los Angeles. Se trata de Santa Barbara, una localidad en la que viven famosos como Oprah Winfrey, Ellen DeGeneres, George Lucas y Gwyneth Paltrow y que han dado la bienvenida al Príncipe Harry y Meghan Markle. Los Duques de Sussex se han mudado a una espectacular mansión, una casa en la que tienen todos los lujos y comodidades y donde van a establecerse de forma definitiva para vivir con su hijo Archie.
La mansión está situada en una zona llamada El Montecito y les ha costado 12,4 millones de euros. Tiene 9 habitaciones y 16 baños repartidos en 1300 metros construidos que se extienden por dos plantas y un sótano. Hay una sala de yoga, un gimnasio, una sala de cine, una sala de videojuegos y una bodega. Estancias tienen más que de sobra y aunque el estilo del interior parece un poco clásico, quizás más del gusto del Príncipe Harry que de Meghan Markle, ahora que es suya pueden cambiar lo que quieran.
The stunning Montecito home, set on over 7 acres, is definitely a stunning piece of property that we are sure Meghan, Harry and Archie will enjoy for years to come. One of the most impressive #RoyalHomeStyletours we've ever taken! ? pic.twitter.com/QBXQVz7Bw0
? RoyalHomeStyle (@RoyalHomesStyle) August 13, 2020
Si el interior de la casa es increíble, el exterior ya es de ensueño. A lo largo de 20.000 metros cuadrados de jardines hay un parque infantil en el que puede jugar Archie, una piscina con vistas, espacios ajardinados, otros más boscosos y lugares con césped. También hay una cabaña con un lago y una pista de tenis. Sin duda, espectacular.
La ayuda del Príncipe Carlos
Sin embargo, no todo son alegrías. La prensa británica señala que detrás de la compra estaría la ayuda del Príncipe Carlos, que a pesar de la decepción que siente por la salida de los Duques de Sussex de la Casa Real Británica, les ha echado una mano económicamente. Además de preocuparse por su bienestar hasta que sean financieramente independientes, sin olvidar que tienen un patrimonio estimado en 35 millones, les habría ayudado a adquirir esta espectacular mansión.
Más allá de criticar la ayuda paterna, Daily Mail cuestiona que se hayan gastado más de 12 millones de euros en una mansión cuando no han terminado de pagar la reforma de Frogmore Cottage. Esto fue uno de los puntos del acuerdo del Sussexit. Los gastos se cargaron a los contribuyentes, pero una vez que iban a dejar de representar a la Corona, se estimó que debían devolver lo que costó de su propio bolsillo. Eso sí, a cambio el Príncipe de Gales se habría comprometido a financiar su seguridad.