La Infanta Elena, despierta hasta que vuelve su hija
"Haces lo que quieres. Has llegado a las siete de la mañana y me tienes harta. Esto se va a acabar", le dijo la Infanta Elena a su hija en mayo de 2019 en un hotel de Sevilla. Pero parece que no se ha acabado. Además, ya venía de lejos. Como señala Vanitatis, en alguna ocasión Victoria Federica se ha escapado corriendo por Madrid para que ni los escoltas pudieran encontrarla, llegando incluso a tirar el móvil a una papelera para que no pudieran llamarla. Ocurrió cuando le prohibieron viajar en Metro como sus amigos. Tenía a su disposición un coche, pero sus amigos no podían ir con ella. Por eso una vez se escapó, tiró el móvil en una papelera de la calle y se metió en el Metro para alejarse.
En otras ocasiones se ha escabullido para irse de fiesta y su madre no se ha enterado. El motivo es que aunque viven en un piso del barrio de Niño Jesús, en el distrito madrileño de Retiro, no se trata de una casa cualquiera, sino de un piso enorme en el que te puedes mover tranquilamente sin que las demás personas que viven allí se enteren. "Para no estar controlada, a veces sale a escondidas, sin decir nada. La casa es grande y puede hacerlo, su madre no se entera, y es la interna quien a veces informa de que Vic se ha ido sin avisar", señala una fuente al citado medio.
Victoria Federica se comporta así porque se cansa del control que quiere tener la Infanta Elena. Quiere saber siempre dónde está y con quién, una tarea con la que hasta los 18 años le ayudaban los escoltas. Doña Elena se mantiene despierta hasta que su hija vuelve a casa por las noches, y no quiere que Victoria Federica se marche sin decirle con quién se va. En ocasiones no hace falta que se lo diga ella, porque ya se encargan los paparazzi de documentar sus salidas. A Victoria Federica no le gusta el seguimiento mediático, pero ya está acostumbrada.