Las reinas no piden perdón ni dan las gracias
Fue entonces cuando se mostraron fragmentos del citado libro que hacían referencia a los homosexuales, colectivo marginado y perseguido a lo largo de la historia, y que sigue sufriendo profundamente en la mayor parte del mundo: "Puedo comprender que haya personas con otra tendencia sexual, pero, ¿Qué se sientan orgullosos por ser gais? ¿Que se suban a una carroza y salgan en manifestaciones?", comentó en su momento Doña Sofía.
Más allá de eso, lo que no le gustaba era que el matrimonio igualitario se llamara matrimonio: "Si esas personas quieren vivir juntas, vestirse de novios, casarse, pueden estar en su derecho, o no, según las leyes de su país, pero que a eso no lo llamen matrimonio porque no lo es".
Al salir el libro con declaraciones tan polémicas, el colectivo LGTBIQ+ criticó abiertamente las desafortunadas palabras de la consorte en un libro que según Pilar Urbano estaba autorizado por los ahora Reyes Eméritos y por el presidente del Gobierno, en aquel tiempo Zapatero. Lo que dolió a Pilar Urbano fue que se mató al mensajero y se le echó la culpa a ella: "Dijeron, 'esto no puede haberlo dicho la Reina, se ha equivocado Pilar Urbano', lo de siempre, matar al mensajero".
¿Qué le dijo la Reina Sofía? Tan solo que aguantara: "Aguanta el tirón. No me pidió disculpas, las reinas no piden disculpas y no dan las gracias. Me dijeron que habría un momento de desagravio... no lo hubo, no me interesaba. El desagravio es que dijeran que lo que dice el libro lo dijo la Reina Sofía, que no le quiten el derecho a la Reina a opinar".