El exmarido de Carolina de Mónaco se ha enfrentado a una condena después de ponerse agresivo con varios agentes.
Ernesto de Hannover se ha presentado en los juzgados de Wels, en la zona de Alta Austria, después de que haya sido citado por ser acusado por amenazas y coacciones a dos agentes de Policía después de que se viera envuelto en un altercado que tuvo lugar durante el verano de 2020. Es más, en dicho momento les intentó agredir con un cuchillo, y días después con un bate de béisbol.
Tras estos escándalos ahora ha sido condenado a diez meses de cárcel tal y como ha hecho saber el juez. Además, esta no es lo único que deberá cumplir, puesto que le ha prohibido beber alcohol durante ese mismo periodo de tiempo, y entre tanto le ha exigido que abandone la propiedad en la que vive en Austria, en lugar donde tuvieron lugar los altercados. Está claro que Ernesto de Hannover quería librarse de cualquier manera de esta condena, pero también de la prensa en su entrada en los juzgados, lugar al que han acudido numerosos periodistas. Lo cierto es que se las ha ingeniado para entrar mucho antes de la citación por una puerta trasera del edificio, y también ha accedido a la sala por una puerta diferente y exclusiva, la entrada que se utiliza para dar paso a las personas que están cumpliendo condena en prisión.
Pero estos movimientos sin pedir permiso no han sentado nada bien al juez que se ha encargado de su caso, por lo que no se ha dirigido a él como príncipe y además le ha impedido que saliera por una puerta trasera, ha sido por eso por lo que la prensa le ha podido fotografiar a su salida. Tan solo han pasado dos horas en el interior, saliendo antes de lo previsto, sin escuchar a los diez testigos ni al psiquiatra que estaba llamado a declarar. Acabo en una unidad psiquiátrica
El motivo por el que se ha marchado antes de tiempo ha sido porque se lo había solicitado al juez teniendo en cuenta la situación sanitaria y que él es un paciente de riesgo por el cáncer que padece, por lo que tiene que extremar las precauciones para no contagiarse de coronavirus. Eso sí, en el interior se ha mostrado arrepentido, disculpándose por los altercados en los que se ha visto envuelto, diciendo: "Asumo la responsabilidad y estoy dispuesto a pagar los daños", aunque ha añadido: "No recuerdo partes de lo sucedido", y es que en el momento en el que ocurrió todo se encontraba en un estado etílico importante. Tuvo que ser reducido por los agentes y fue ahí cuando terminó en la unidad psiquiátrica de un hospital cercano donde pasó la noche. A pesar de que el exmarido de Carolina de Mónaco ha sido condenado a diez meses de prisión, no tendrá que poner un pie en la cárcel de momento. Además de que puede ser apelada, como así hará su equipo de abogados, solo cumpliría condena entre rejas en caso de que Ernesto de Hannover incumpliera alguna de las otras condiciones impuestas por el juez.